"Hacia las 15.30 (13.30 GMT) hemos recibido a este niño, de 5 años. Estaba quemado al 100 % por la explosión en Nuseirat", explicó la fuente en mensajes de audio.
Aunque recibió tratamiento en el Hospital Al Awda de Nuseirat, murió tras ser trasladado a la unidad de cuidados intensivos en el Mártires de Al Aqsa, en Deir Al Balah (también en el centro de la Franja).
El hermano del fallecido, de 11 años, también resultó herido y llegó con quemaduras al Al Awda.
El explosivo detonó en la vivienda de la familia Souri en la calle Al Joauni del campamento de refugiados de Nuseirat, según la Defensa Civil de Gaza, que asegura que se trataba de una munición abandonada allí por el Ejército de Israel.
"Tres incidentes ocurrieron hoy en varias zonas de la Franja de Gaza, causados por explosiones de munición sin detonar dejadas por la ocupación israelí", recoge un comunicado posterior de Defensa Civil.
Este servicio de emergencias responsabilizó a Israel y al centro de coordinación de Estados Unidos de estos incidentes, asegurando que este último y otras partes implicadas han planteado "retrasos y dilaciones injustificadas" a la hora de lidiar con el problema de las municiones sin detonar.
En enero, el Servicio de la ONU de Actividades Relativas a las Minas (UNMAS) estimaba que entre el 5 y el 10 % de las municiones disparadas en Gaza no detonaban.
El responsable en los territorios palestinos de UNMAS, Julius Van Der Walt, lamentaba a principios de diciembre que unas 400 personas han muerto en la Franja de Gaza a causa de las municiones sin detonar.
En una comparecencia en Ginebra, Van Der Walt advirtió que el desminado de Gaza es aún más complicado por la enorme cantidad de escombros que sepulta mucho de estos materiales no detonados.
El menor fallecido se suma a los en torno a 20.000 niños que han muerto a causa de la ofensiva de Israel en Gaza, lanzada en represalia de los ataques del 7 de octubre de 2023 en los que las milicias gazatíes mataron a 1.200 personas y secuestraron a otras 251 en territorio israelí.
Además, casi 44.500 menores han resultado heridos en los dos años de ofensiva, según los datos de UNICEF.