"No olviden que nadie es dueño de los bienes, sino simplemente somos administradores. Nadie tiene el derecho a tratar a las personas como cosas sin valor”, expresó el líder religioso.
En ese sentido, sostuvo que los obstáculos para acceder a una sociedad más justa son la deshonestidad, la intolerancia y la corrupción.
El obispo mencionó que el aumento de la violencia en los últimos tiempos es quizás el grito de muchos jóvenes cuyas necesidades jamás fueron asistidas ni por las autoridades ni por sus familias.
Añadió que “todos somos responsables de esta situación, que requiere una urgente intervención”.
Luego de la celebración litúrgica realizada en la explanada del templo parroquial, se realizó la tradicional procesión de la sagrada imagen por las calles aledañas.
Posteriormente se inició el desfile cívico, militar, policial y estudiantil en homenaje a la victoria de la Batalla de Boquerón. El acto cuentó con la presencia de autoridades nacionales, departamentales y de Nueva Colombia.