La población se ubica a casi 900 kilómetros de la capital del país y es el distrito del Chaco más castigado por los incendios forestales. Sus pobladores hicieron un alto en sus labores y participaron de las celebraciones en honor a la santa patrona de la comunidad ayer, martes.
Una de las peticiones más solicitadas por los moradores es que paren los incendios y llueva para que se pueda limpiar el aire contaminado que se respira en la zona.
El obispo Gabriel Escobar, durante su homilía, pidió mayor compromiso a las autoridades y que cumplan sus promesas electorales, y a los pobladores, estar atentos a la falta de respuesta de los gobernantes para castigarlos en futuras elecciones a través de los votos.
Una vez más pidió a las autoridades dejar de ser “figuretis” y aparecer solo para lucirse en fotos durante eventos especiales, dejando de cumplir sus obligaciones.
Al término del encuentro religioso se realizó la procesión de la sagrada imagen por las calles de la comunidad ante el sofocante calor chaqueño y las fuertes ráfagas de viento norte que se registraba por momentos.
Entre las autoridades presentes se pudo observar al gobernador José Domingo Adorno participando de las actividades. Al final de las celebraciones religiosas, las personas degustaron en familia un sabroso asado a la estaca que fue una donación de los ganaderos locales.