ENCARNACIÓN. Esta es una respuesta política a una intención política de los concejales de tumbar un gobierno democráticamente electo por el pueblo con un pedido de intervención traído de los pelos, sostuvo uno de los manifestantes que participó de la demostración.
La caravana, convocada por la intendencia, fue en respuesta a una decisión de la Junta de Encarnación para solicitar al Congreso que se apruebe una intervención del Ejecutivo, luego de cuatro años de rechazo sistemático de su ejecución presupuestaria.
Para el presidente de la comisión de Hacienda y Presupuesto de la Municipalidad, el concejal Eduardo Florentín (ANR), existen sobrados motivos para pedir la intervención, como la sobrefacturación en el programa de merienda escolar, falta de transferencia de recursos a entes en los que el municipio actúa como agente de retención, uso desmedido de combustibles y lubricantes, la no presentación de los documentos de la ejecución presupuestaria del año 2018, entre otros.
Estos argumentos fueron rechazados por el intendente Luis Yd, quien sostuvo que toda la documentación y justificaciones fueron presentadas en tiempo y forma. El administrador comunal tildó a la actitud de los concejales como una “sucia” jugada política para meterse en la intendencia “por la ventana” y no a través del voto popular.
Cuestionó que por una actitud de revanchismo político la bancada colorada, desde el primer año del gobierno municipal de Yd, rechazó sistemáticamente su informe de ejecución presupuestaria cuando algunos de esos mismos concejales en periodos anteriores aprobaban la rendición de intendentes colorados “a libro cerrado”, durante un periodo en que se produjeron escandalosos casos de corrupción, remarcó.
Para concretar el pedido de intervención –el jueves, en sesión extraordinaria de la Junta- fue vital para los siete colorados contar con el voto del liberal Julio Arévalos, quien otorgó la mayoría necesaria de dos tercios. Arévalos es integrante de la Alianza que llevó a Luis Yd al gobierno comunal, y su posición fue tildada de “traición” a la posición aliancista de su partido, el PLRA, denunciaron sus correligionarios en comunicados dados a conocer a la opinión pública el pasado de julio.