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Las precipitaciones, que ya superan los 100 mm, hacen que la situación empeore porque, además del camino intransitable, se le suma la acumulación de agua de lluvia dentro de la ciudad, que está rodeada del muro que le protege del desborde del río Paraguay. Solamente un motor de la estación de bombeo funciona con la capacidad total, mientras que el otro motor opera únicamente al 50%.
“Por suerte, ya llegaron los funcionarios de la Secretaría de Emergencia Nacional, que trajeron lanchas y motobombas, con esos equipos vamos a tratar de desaguar la ciudad, porque los barrios están inundándose a causa de que estamos como en una palangana por el muro que nos rodea”, expreso Bogarín.
Por otro lado, dijo que la Gobernación de Ñeembucú asistió con más 600 kits de víveres y se está haciendo la distribución. “Ojalá que les llegue a todos”, dijo.
“Hay gentes que están recibiendo sin que sean inundadas. Pero eso siempre ocurre; no hay una responsabilidad seria del intendente, porque primero se les tiene que asistir a las familias afectadas por la creciente. Sabemos que hay necesidades, pero primero están los afectados por la creciente”, agregó.