Funcionarios de la Municipalidad de Asunción intervienen esta mañana, por quinta vez, el inmueble abandonado del ex Molinos Harineros, en Itá Pytã Punta. El sitio, además de altas malezas, se convirtió en un gran vertedero “clandestino”, en el cual se arrojan todo tipo de desechos. El procedimiento se realizó en el marco de los trabajos para eliminar criaderos de mosquitos. La mayoría de los barrios de la capital del país están en zona roja por chikunguña.
Si. A todos nos dio risa la reacción del ministro de Salud en plena conferencia de prensa en la que su par de la SEN proponía la quema de cubiertas como “gran solución” para combatir la proliferación de mosquitos transmisores del dengue y chikunguña. Fuimos, una vez más, testigos de expresiones desafortunadas debido a la falta de preparación de una autoridad que por priorizarse frente al micrófono además de hacer el ridículo y contravenir leyes ambientales, nos hace perder precioso tiempo, dinero y eventualmente vidas en una epidemia que se nos viene encima.
La epidemia de chikunguña, que ya sumó 2.122 casos confirmados este año, “nunca fue tan grande”, según el doctor Guillermo Sequera, director de Vigilancia de la Salud. Autoridades sanitarias se reunieron ayer con intendentes y representantes municipales para pedir mayor compromiso.
La chikunguña alcanzaría su punto más crítico entre fines de enero y principios de febrero, según el ministro de Salud. Julio Borba se reunió con intendentes para reforzar el trabajo en los municipios para combatir al mosquito transmisor.
Ocho personas adultas y un menor de dos meses se encuentran en terapia intensiva por cuadros graves de chikunguña, explicó el titular de la Dirección de Vigilancia de la Salud.
De acuerdo al reporte del Ministerio de Salud, nunca antes se tuvo una circulación tan elevada de casos de chikunguña a nivel país. En las últimas semanas se registraron 2.754 pacientes, mucho más que el dengue, que solo enfermó a 22 personas en el mismo periodo. En febrero, la situación podría empeorar.