“Cupo político” no significa cargos para politicastros ni “nepobabies”
El canciller Rubén Ramírez Lezcano trató de justificar el bochornoso enchufe de Yamida Esgaib, hija del impresentable diputado Yamil Esgaib, en la sede diplomática paraguaya en Londres. Invocó la ley relativa al servicio diplomático y consular y al administrativo y técnico de la cartera a su cargo. Es cierto que esta norma permite la incorporación transitoria de personas ajenas al escalafón diplomático y consular –sin calificarla de “política”–, pero solo bajo ciertas condiciones que el canciller prefirió omitir por motivos comprensibles. Es para poner en el servicio exterior a gente capacitada para servir al país en circunstancias especiales, y no para regalar cargos diplomáticos a politicastros obsecuentes y “nepobabies” caraduras.