Las operaciones, desveladas este martes por el programa de la cadena pública de televisión Nieuwsuur a partir de información confidencial de la propia compañía, se produjeron pese a las crecientes advertencias del Gobierno neerlandés, que empezaron ya en 2023, sobre el riesgo de que esta tecnología avanzada acabara siendo utilizada para fines militares o represivos en China.
El conocido como 24 Instituto de Investigación del CETC, con sede en Chongqing y que, según su propia documentación, alberga el único laboratorio nacional de chips militares del país, adquirió en 2024 un componente para calibrar una máquina de chips de ASML.
Ese centro ha participado en programas espaciales chinos y desarrolla tecnología empleada en sistemas de misiles y drones.
ASML declinó comentar sobre casos específicos, pero aseguró que cumple de forma estricta la normativa y que los productos mencionados son “genéricos y antiguos”, no sujetos a restricciones de exportación.
La compañía también recalcó que corresponde a los gobiernos, y no a los proveedores, determinar qué clientes deben estar sometidos a controles por motivos de seguridad nacional.
Sin embargo, expertos consultados por Nieuwsuur afirman que los componentes enviados a China son cruciales para el funcionamiento de una máquina de litografía, lo que dificulta el control estatal sobre su uso final.
La investigación también revela que, en febrero de 2024, la Academia Cuántica Internacional en Shenzhen recibió de ASML una máquina de litografía DUV, pese a que los propios servicios de inteligencia neerlandeses han alertado de los riesgos del desarrollo de tecnología cuántica por parte de China, incluida su posible aplicación militar en radares capaces de detectar submarinos.
El Ministerio neerlandés de Exteriores consideró en respuesta que la exportación de tecnología a la industria de defensa china es "indeseable", aunque insistió en que no todos los componentes de alta tecnología son sensibles ni requieren licencia, por lo que las medidas de control se aplican únicamente a los productos clasificados como estratégicos.
Además, el canal neerlandés asegura que varias de las empresas chinas que adquirieron productos de ASML figuran en listas de sanciones estadounidenses por sus vínculos con las fuerzas armadas de China.