“Ando metido en un domingo delirante, amanecido, loco en este desastre. Y escucho voces, que me dicen “Andate”. Estoy perdiendo en esta guerra contra mí. Atormentado, sin paciencia ni fe. Estoy buscando una esperanza. O algo que perdí de mí”, señala parte de la canción “Dominguicidio” de la banda de rock Tan Biónica, que tuvo como principal vocalista a Santiago «Chano» Moreno Charpentier, quien es centro de las noticias en el sector del espectáculo, sobre todo de Argentina. Y no precisamente por haber registrado un despliegue con el talento que lo caracteriza como artista, sino por un episodio donde él resultó herido con arma de fuego. Fue a parar a UTI. Le extirparon el bazo, parte del páncreas y el riñón. Todo sucedió en medio de una crisis por efectos de alguna droga, al menos es lo que trascendió hasta ayer.
Más de 500 metros lineales de rejas fueron colocadas en el 2011 a la Plaza Uruguaya de la capital, en un intento de “frenar” las ocupaciones de grupos indígenas y de otros sectores que frecuentaban el casco céntrico para manifestarse. Este vallado fue uno de los más polémicos. El primero –pero que no creó tanto revuelo– fue el de la Plaza Italia, en el 2010.
Pandemia, cuarentena, bajante del río, sequía, dengue, incendios, calor de 42 grados con sensación térmica de 50, tareas online, despidos, suspensiones, imputaciones “según la cara del cliente”, ventas bajas, cortes de energía eléctrica repentinos, sin agua potable, sin lluvia... este 2020 sí que será un año inolvidable.
La educación bajo la modalidad virtual (no presencial) está volviendo literalmente “locos” a un gran número de padres de familia y docentes (muchos de ellos también padres). Y es que además de afrontar la pandemia de despidos, suspensiones y reducción de sus salarios, deben equilibrar los quehaceres de la casa, la carga de tareas, el pago del servicio de internet, la cuota por la notebook y más.
Contagiar de alegría a los más chicos hoy en su día y en medio de una pandemia ha de ser, sin dudas, un gran desafío para muchos padres de familia que –pese a los despidos, suspensiones y la falta de un sustento laboral fijo– se las ingeniaron para acercar el obsequio y generar esa sonrisa.
En lo que va del año, dos espejos de agua se tiñeron de rojo en nuestro país. El primero correspondió a un tajamar ubicado en la localidad de Loma Plata, en Chaco, cuyos estudios concluyeron que se debió a un fenómeno natural, mientras que el segundo acontece en la compañía Piquete Cue de la ciudad de Limpio y que a diferencia del primero se registra por una criminal contaminación.
Las compras a granel de arroz, yerba, fideo, azúcar y otros alimentos se convirtieron en una de las salidas estratégicas de las familias, que de alguna u otra forma buscan optimizar el presupuesto de la canasta básica para hacer frente a esta dura pandemia.