A la “casa” de un gran sueño

Construir, adquirir una casa o departamento implica para muchas familias y trabajadores independientes una meta a cumplir a largo plazo. Sin embargo, con el abanico de opciones inmobiliarias y de financiamiento lanzadas en los últimos años, este sueño largamente acariciado se torna más próximo y real.

Sueño & realidad
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Una casa representa una inversión y, como tal, se precisa de un asesoramiento antes de tomar la decisión. Esto es vital y, en ese sentido, muchos asalariados –solteros o en matrimonio– analizan las opciones más convenientes a la hora de hacer su búsqueda.

Antes de decidirse por alguna de ellas, este público lleno de ansias y sueños pone en la balanza varios componentes y ya no solamente el precio. Así lo explican especialistas del sector inmobiliario, quienes hablan de avances y cambios en la oferta y demanda habitacional, y de puntos a mejorar para facilitar el acceso, sobre todo para la clase media.

Observan desde los servicios públicos y privados que tendrán en puerta (sean escuelas, centros comerciales, medios de transporte, agua y otros), o si algún pariente o compañero laboral vive en las inmediaciones, las vías de acceso, el monto del impuesto inmobiliario y tasas municipales, etc.

Así lo explica Eric Salum, presidente de la Cámara Paraguaya de Empresas Loteadoras e Inmobiliarias (Capeli), quien añade que, si bien el precio del inmueble influye, en la actualidad un porcentaje de la población opta por mudarse a vivir “adonde el bolsillo le da”, mientras que el otro espera encontrar alternativas que estén más cercanas a su lugar de trabajo, sea en un edificio de departamentos o una casa con patio.

A todo esto agrega que el factor crédito cumple un papel fundamental en este tema y que se deberían ajustar ciertos condimentos para agilizar justamente el acceso a la tierra y más aún a la vivienda a la clase social media, considerando que las propiedades –sobre todo de la Gran Asunción– se cotizan cada vez más. “Si bien hay más facilidades, se debe revisar esa cuestión”, sostiene.

Financiamiento

En el 2019, la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD) desembolsó US$ 11.353.130 para 408 pedidos de créditos del producto Primera Vivienda, cuya tasa es del 7,5% anual. En el mismo segmento, pero durante el 2020, entregó US$ 13.052.554 para 482 solicitudes canalizadas por distintas entidades bancarias y financieras, lo que arroja un promedio de un poco más de US$ 27.000 por cada beneficiario.

De acuerdo el ranking de la banca de segundo piso, las diez ciudades donde más se ejecutan estos créditos en el departamento Central son Luque, San Lorenzo, Ñemby, Capiatá, Villa Elisa, Limpio, Mariano Roque Alonso, San Antonio, Ypané y J. Augusto Saldívar. De las 482 carpetas que tuvieron luz verde, tan solo 16 fueron para compra o edificación en Asunción.

Dicha agencia cuenta con otros productos y tasas diferenciales enfocados a la casa propia, con planes de pagos bajo hipoteca o con garantía fiduciaria de hasta 30 años. Si bien registra una liquidez en estos planes, la ejecución todavía es baja con relación al déficit existente en materia de vivienda.

Al respecto, la presidenta de la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD), María Fernanda Carrón, sostiene que más allá de la cartera de créditos disponibles lo que también hace falta en Paraguay es “evangelizar” el concepto de la vivienda, sobre todo en las nuevas generaciones.

Afirma que para acceder a ese portafolio de opciones que se ofrecen hoy en el mercado y a los créditos blandos, gran parte de la sociedad debe primeramente sanear sus finanzas, erradicar ciertos malos hábitos como las compras de impulso y poner un alto al consumo masivo.

Añade que en los hogares debe hablarse de la importancia de tener o apuntar a hacer realidad el sueño de la casa propia y de tener un ahorro en caso de ser un requisito. “(La casa) Es un bien patrimonial, un activo de alto valor. A veces debemos sacrificar deseos como tener un buen teléfono o ropas de marca específica, cuando apuntamos a una inversión como nuestra casa propia”, ejemplifica.

Agrega que el sobreendeudamiento como también la informalidad hace que muchas carpetas sean rechazadas por los bancos de plaza. Esto origina que dichas familias o parejas vivan casi eternamente en alquileres y que este escenario se replique en los hijos.

Tendencias para vivir

Si bien predomina todavía el deseo de la casa con jardín, un gran porcentaje de los interesados de la clase media ya opta por la tendencia del mercado, que consiste en vivir en residencias en altura con espacios optimizados. Conseguir una unidad acorde a la realidad del bolsillo es una ardua tarea.

Pero para hacer más viable la compra, deben participar y accionar varias instituciones, recalca el ingeniero Raúl Constantino, presidente de la Cámara Paraguaya de Desarrollos Inmobiliarios (Capadei), quien refiere que la primera vivienda para la clase media es un tema abordado por los gobiernos de turno, pero no pasa de ser un abordaje.

Para la cabeza de este gremio, se ven intenciones en cuanto al desarrollo de los créditos hipotecarios para el acceso a la primera vivienda. No obstante, sugiere que a la hora de lanzar planes de financiamiento se apunte a toda la sociedad y no solo a un determinado segmento.

“Para resolver la problemática, no solamente debe estar el dinero, sino que deben involucrarse las municipalidades, la Dirección de Catastro, el Poder Judicial, el Banco Central y una cantidad de actores que busquen una solución real. Eso falta, que nos sentemos todos”, especifica.

El sector privado –puntualiza–, sobre todo los desarrolladores inmobiliarios, tiene predisposición y está haciendo su parte creando productos, pero precisa de mayor acompañamiento y de voluntad política para hacer más factible la ejecución del financiamiento.

Por último, aconseja a los jóvenes ir pensando en qué invierten o destinarán el fruto de su esfuerzo: “Muchos prefieren viajar, comprarse un auto, o cambiar de TV mientras están en alquiler. Entonces, debemos prepararnos como sociedad, por si mañana se dé la oportunidad de tener el tan anhelado crédito para la primera casa”.

[el dato]

Las 10 ciudades preferidas en Central son Luque, San Lorenzo, Ñemby, Capiatá, Villa Elisa, Limpio, Mariano Roque Alonso, San Antonio, Ypané y J. Augusto Saldívar.

Déficit habitacional

Según un estudio elaborado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) sobre el creciente déficit habitacional en América Latina y el Caribe, 43 de cada 100 familias no cuentan con un techo para vivir o habitan en viviendas de mala calidad en el Paraguay.

De acuerdo a los datos que se administran, en Paraguay, el déficit afecta a una importante franja de la población (desde los grupos más vulnerables hasta la clase media), siendo la oferta de vivienda social insuficiente, pues se tiene una carencia actual de 1.100.000 viviendas.

Fuente: Secretaría Técnica de Planificación.

emilse.rolon@abc.com.py

Portada: Jakub Krechowicz/shutterstock.com

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