Sobre esta ave Félix de Azara consignó en su manuscrito:
“Es ave hermosa. Aquí la llaman Taguató, que es nombre que dan a toda ave de rapiña, y para distinguirle le he añadido el adjetivo acanelado por su color. He visto algunos de la especie, pero pocos, y solo en los viajes de esta Provincia”; y, en sus Apuntamientos, agregó:
“Los guaraníes le suelen llamar taguató pitá (gavilán rojo), y los españoles gavilán acanelado”.
Gatti (Enciclopedia) y Bertoni (Vocabulario) coinciden en el nombre común de la especie; taguató-pĩtà, según la grafía del primero, y taguató pĩhtã, de acuerdo con la del segundo.
El individuo que Azara describió en el manuscrito (y el referido de los Apuntamientos) era un juvenil de la especie, al cual mató de un fusilazo, sin precisar dónde. En sus Apuntamientos señaló que es una especie numerosa, pero que nunca la vio “al sur de los 29 grados”.
Nomenclatura
Sonnini consideró que era una especie nueva, sin embargo, no es otra que el Falco meridionalis [Heterospizias meridionalis] del ornitólogo británico John Latham (1790, Index Ornith., p. 36, esp. 82; basado en su Rufous-headed Falcon: 1787, Syn. Sup. p. 33, esp. 107).
La palabra latina meridionalis (meridional o del Sur, de meridies o mediodía), que la identifica, está vinculada con la mención que sobre su residencia dio Latham: “Vive en Cayena”.
Costumbres
Del Taguato pytã anotó Azara en el manuscrito:
“Se para en árboles y en el suelo, le he visto sobre un Tacurú o mogote de tierra en mitad de un bañado atisbando, sin duda comerá caracoles y ranas. Me dicen que persigue y come todas las víboras, y ya se supone que lo mismo hace con gallinas y aves”; y agregó en sus Apuntamientos que esta ave:
“Carece de diferencia sexual, y a veces se juntan muchos en las quemazones del campo mezclados con las águilas y con la familia siguiente [sus gavilanes mixtos], atisbando las víboras y cogiendo insectos al vuelo”.
Nido
Sobre su nido consignó Azara:
“nada más sé de él, pero mi conjetura de que cría en agujero es muy fundada, y que es angosto, pues no puede haberse gastado sus plumas tan conocidamente de otra forma”.
En sus Apuntamientos dejó constancia que no había visto su nido pero que, le aseguraron, era “idéntico al del caracará, y situado del mismo modo”; y, que el Taguato pytã “solo pone por septiembre dos huevos color de clavo salpicado de sanguino, no tanto como en el caracará, y un poco más agudo en un extremo, siendo sus ejes veintisiete un tercio y veintiún tres cuartos de líneas”.
Caracteres
Azara desechó los siguientes del Taguato pytã en sus Apuntamientos:
Pies y tarso: con escamas; de las cuales las anteriores son algo verdosas. La parte posterior del tarso es desnuda, inclusive su articulación con la pierna, pero por delante dicha articulación es vestida. Las uñas son afiladas, no mucho, corvas y negras. Tiene tres dedos anteriores, y uno posterior; todos robustos;
Pico: cubierto en su mitad por una membrana amarilla que, desde el caballete, da vuelta por ambos lados circularmente hacia la base. En dicha membrana están las ventanas de las narices en el primer tercio de la altura del pico, contada desde el caballete. Dichas ventanas son redondas, y dentro de ellas se ve un apéndice en forma de cabeza de clavo amarillo que no toca las bordas del agujero o ventana. El total de pico es corvo y fuerte. Su labio, o borda superior, está cubierta con membrana desde el ángulo, quedando entre esta borda cubierta y dicha parte circular -donde está la nariz- un intermedio de membrana blanquizca cubierta de pelos negros aborrascados, derechos en la cercanía del lagrimal, y blancos - dirigidos hacia delante- en la inmediación del pico. Su mitad inferior está cubierta de membrana amarilla hasta donde iguala o empareja con la membrana amarilla de la mitad superior. La borda de la mitad inferior cubierta de membrana tiene pelos rectos, largos, negros, dirigidos hacia adelante, y un poco hacia arriba. La horqueta tiene una borrasca de dichos pelos negros. Todo el pico restante es negro, menos un poco abajo de las narices que es azulado. La mitad superior tiene en la base del caballete una entradita en la cabeza formada de plumitas y pelos dirigidos hacia arriba;
Cabeza: la mitad de la distancia entre el lagrimal y la dicha entrada del pico en la cabeza, contada desde la mencionada entrada, está poblada de plumitas blancas, y la otra mitad está cubierta con membrana algo verdosa, y del mismo color sin pluma, ni pelo, es la piel que cubre la borda, y debajo del hueso que sobresale y cubre el ojo, igual que el Kurukuturi. Este hueso se adelanta al lagrimal saliendo insensiblemente de la raíz de la mitad superior del pico detrás de las narices, y se extiende curvamente hasta acabar cerca del ángulo exterior del ojo, esto es lo mismo en el Kurukuturi. La barba de los párpados es amarilla poblada de pelos negros y todo el párpado inferior es cubierto de plumitas blancas. No tiene el Taguatoy la cabeza aplastada por encima como el anterior. Las plumas sobre ellas y sus costados (de la cabeza) son castaño oscuro.
Ojo: negro; iris de color de marfil. Después de catorce horas de muerto este pájaro mantenía sus ojos íntegros, sin vaciarse ni evaporarse.