El jefe de Gobierno necesita el respaldo de dos tercios de la Cámara de los Comunes para avanzar unas elecciones, un beneplácito que ya le fue negado el pasado miércoles. No obstante, Johnson insistirá mañana con la convocatoria a comicios.
Los partidos de la oposición y un sector de los conservadores se han movilizado para impedir un brexit duro o salida sin acuerdo, por temor de que se produzcan secuencias económicas, por escasez de alimentos o medicinas y un encarecimiento de las mercancías que vienen de la UE. Además de un posible conflicto en la frontera de Irlanda.
La legislación para evitar un brexit “duro” fue ratificada por la Cámara de los Lores y quedó lista para entrar en vigor mañana, pero los laboristas han decidido variar su estrategia y sumarse en cambio a una alianza con otras fuerzas opositoras para vetar unos comicios.
Al entrar en vigor la normativa, el Gobierno contará con un plazo de hasta el 19 de octubre para llegar a un acuerdo sobre las condiciones de salida de la UE, o bien estará obligado a solicitar una prórroga. Esto último rechazado tajantemente por Johnson.
Progreso
El jefe de Gobierno considera que la amenaza de una salida abrupta, un escenario que puede dañar tanto al Reino Unido como a la UE, es su principal baza negociadora para obtener mayores concesiones de los 27 socios comunitarios restantes.
Johnson ha asegurado esta semana que ha habido “progresos” en las negociaciones con Bruselas, donde el enviado del Gobierno británico para el brexit, David Frost, ha continuado manteniendo contactos.
Sin embargo, no se ven señales de que la UE esté dispuesta a suprimir del acuerdo de salida la cláusula para evitar una frontera en Irlanda del Norte, la principal exigencia del mandatario británico.
Con las manos atadas ahora por ley en la negociación y sin una mayoría parlamentaria, Johnson considera que el único camino viable para su Gobierno pasa por un adelanto electoral, que esperaba fijar para el 15 de octubre.
Tras unos comicios, sin embargo, Johnson recuperaría el control de los Comunes y, potencialmente, tratar de deshacer el veto legal a un brexit sin acuerdo.