Las mujeres trabajadoras sindicalizas de la “Unidad Sindical Kuñanguéra Pokatu” reafirman su compromiso con las trabajadoras y salen a las calles rescatando la tradición y los métodos de lucha de las trabajadoras del siglo pasado en cuyo reconocimiento se instituye el 8 de marzo como Día Internacional de las Mujeres Trabajadoras.
Ley de jubilaciones
“El actual gobierno de Mario Abdo, presentó una serie de leyes al Parlamento, cuyo objetivo es precarizar y expoliar aún más al pueblo trabajador, una de ellas es la cuestionada Ley de Superintendencia de Jubilaciones y pensiones, cuyo verdadero objetivo es liberar los fondos jubilatorios en inversiones (compra de bonos, préstamos blandos a patronales, etc.) poniendo en peligro la posibilidad de un retiro digno para miles de trabajadoras y trabajadores.
“Estos son apenas algunos de los datos que demuestran las desventajas que las mujeres debemos afrontar en el mercado laboral y para mejorar estas condiciones consideramos fundamental que las mujeres se organicen para que junto a las demás reivindicaciones que afectan al conjunto de la clase trabajadora, luchemos por superar estos obstáculos e injusticias que soportamos las trabajadoras” dicen las mujeres de Unidad Sindical en su pronunciamiento por el 8M. También exigen el respeto a todas las leyes laborales y el cumplimiento de los Convenios Internacionales.
Desigualdad y desempleo
Muchas son las barreras y obstáculos que las mujeres deben sortear en la combinación de las tareas laborales y las tareas domésticas y de cuidado. La brecha salarial entre hombres y mujeres es de un 25% en promedio. También las mujeres son las más desempleadas.
Una cruda realidad que preocupa especialmente a las mujeres trabajadoras que componen el 50% del mercado laboral. Los trabajos más precarios e informales son realizados por las mujeres (62% según la OIT), en los lugares de trabajo el acoso sexual es parte lamentablemente de lo cotidiano.
Las mujeres no llegan igual a los cargos directivos. Según datos de la Dirección General de Estadística, Encuestas, y Censos (DGEEC), la proporción de mujeres en cargos directivos es de 34.95 % frente a 65.55 % de hombres. La brecha es de 30%.