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Ante la toma las autoridades de la UC denunciaron por supuesto “hecho punible de coacción y ocupación” ante la fiscalía a los estudiantes Camila Corvalán, Aurora Lezcano y Martín Couchonnal. También al docente José Carlos Lezcano y a la egresada Cecilia Vuyk.
El abogado defensor de los estudiantes, Guillermo Ferreiro, recusó ayer al fiscal Eugenio Ocampos, quien lleva el caso, ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM). “Hay una denotada parcialidad y desconocimiento del derecho de este fiscal. Se fue hasta el rectorado para pegar en la muralla las notificaciones para personas desconocidas”, dijo.
El Consejo de Gobierno de la Universidad Católica, mediante un comunicado, solicitó a los estudiantes que ocupan el rectorado y a quienes “se alzan como responsables” que abandonen inmediatamente el lugar, a fin de que permitan la normalización de todas las actividades universitarias.
Por su parte, monseñor Ignacio Gogorza, de la UC, dijo que no solicitarán un desalojo porque pretenden agotar el diálogo para hallar solución.