En la exposición de motivos mencionan que ante la preocupante situación sanitaria y económica por la que está atravesando el país, se impone de manera urgente y perentoria la reingeniería del destino de las partidas presupuestarias asignadas a determinados rubros, como ser: bocaditos, pasajes, viáticos, cupos de combustible, asignaciones extraordinarias, dobles y triples aguinaldos, regalos protocolares, ornamentos de varias instituciones públicas, etc., previstos actualmente en el Presupuesto General de la Nación 2020; de forma tal que todo lo identificado pueda ser eliminado; disminuyendo los altos costos burocráticos prescindibles, para que los mismos sean redireccionados a las necesidades inmediatas y urgentes para hacer frente al covid-19.
El fondo de emergencia para hacer frente al covid-19 estará compuesto de las partidas presupuestarias asignadas a sostener gastos que pueden considerarse excesivos e innecesarios y posteriormente blindados en el marco de la ley y la reglamentación donde se garantice la más absoluta transparencia en su uso, y destinados al sistema de salud pública de salud para proteger al personal de blanco con la dotación de insumos y equipos adecuados para enfrentar esta potencial epidemia, además, la programación y compra de ambulancias, camas de terapias intensivas, respiradores, y todo aquello necesario para sortear con buenas chances la atención de salud de la ciudadanía paraguaya.
Plantean crear el fondo con G. 25.000 millones del Parlasur, G. 48.000 millones de concejalías departamentales; G. 14.000 millones combustible de diputados, senadores y parlasurianos; G. 23.000 millones, aproximadamente en seguro médico, y establecer un monto concreto de los fondos sociales de Itaipú y Yacyretá.
Kattya González, Norma Camacho del PEN, y Sebastián Villarejo y Sebastián García, del PPQ, piden al titular de Diputados, Pedro Alliana (ANR, cartista), instruir a los técnicos para elaborar el proyecto de ley final.