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El clima frío es una puerta abierta a los virus respiratorios porque poseen una mayor capacidad de proliferación y expone a todos, porque el virus se encuentra en las secreciones nasofaríngeas, de nariz y garganta, que el enfermo expulsa al toser, hablar y estornudar. El virus entra por la nariz, garganta y la conjuntiva de los ojos.
“Las poblaciones desplazadas y hacinadas que produce la crecida del río constituyen uno de los grupos de riesgo, ya que la transmisión es más probable. La vacunación se puede realizar todo el año y como hay más virus de influenza en esta época, tenemos que incrementar la vacunación, que luego de aplicada tarda 15 días en hacer efecto”, dice el doctor Hernán Rodríguez, director de Vigilancia de enfermedades transmisibles del Ministerio de Salud.
Habla, asimismo, de la población blanco: “Si consideramos la edad, los chicos de seis meses a tres años, y adultos de 60 años en adelante. También las mujeres embarazadas están en grupos de riesgo no patológico, y quienes sufren enfermedades como diabetes, del corazón, pulmones, obesidad mórbida; todos esos grupos tienen riesgo de presentar cuadros graves”, alerta.
Explica que “la vacuna antigripal no contiene virus dentro de su composición, por lo tanto, no puede producir una enfermedad respiratoria. El que se vacunó y luego se enfermó es porque en el ambiente hay virus circulando, y en 15 días recién va a estar protegido, pero no está blindado contra los otros virus”.
El proceder depende del médico, si el análisis para influenza sale negativo no se descarta su existencia, según el facultativo, ya que hay un porcentaje de falsos negativos. Pero el médico observa todos los síntomas y tiene el respaldo científico para realizar un tratamiento específico. Subraya que “los cuadros virales no se tratan con antibióticos, que se usan solo cuando hay bacterias. El único cuadro viral con tratamiento es la influenza: con un antiviral contra el virus influenza, con previos análisis laboratoriales”, sostiene el infectólogo.
Recomendaciones válidas
Se insiste en la higiene: el frecuente lavado de manos y después el alcohol en gel, uso de mascarillas para tapar boca y nariz. Si los niños están enfermos, debemos lavar y desinfectar los juguetes y objetos de usos frecuentes, como picaportes, pasamanos, celulares, etc., porque las secreciones quedan por varias horas, incluso días si el ambiente es frío y húmedo. Las personas con cuadros respiratorios no deben estar en escuelas y colegios, lo indicado es consultar a un médico.
La influenza
El oportuno congreso sobre infectología realizado en Asunción refrescó algunos conceptos sobre la influenza. El doctor Rodríguez aborda la población de mayor riesgo: “Profesionales de la salud, militares, policías que tienen riesgo de exposición por el tipo de trabajo, así como los bomberos, empleados de instituciones, por ejemplo, Essap, ANDE, y los periodistas”, advierte. Estos cuadros serán atendidos con prioridad, no por la gravedad, sino por el contagio que se puede dar. Y ahí se decide la internación.
mirtha@abc.com.py
Fotos Archivo ABC Color y Pixabay