“El espíritu de colaboración que nos guió para esta iniciativa puede continuar en el futuro. Si algo nos ha enseñado esta situación excepcional, es que podemos superar las crisis si colaboramos y trabajamos en servicio del cine “, dijo en rueda de prensa el director de la Mostra, Alberto Barbera.
Venecia ha congregado a los directores artísticos de ocho de los grandes certámenes europeos: Barbera; el de Cannes, su principal competidor, Thierry Fremaux; el de San Sebastián, José Luis Rebordinos; la de Locarno, Lili Hinstin; la de Rotterdam, Vania Kaludjeric, y el del checo Karlovy Vary, Karel Och. Dos no estuvieron en la rueda de prensa, pero se han sumado a la iniciativa: Carlo Chatrian, de la Berlinale, quien estaba todavía viajando a Venecia, y la del Festival de Londres, Tricia Tuttle, que tuvo que suspender su asistencia por motivos familiares.
El objetivo es en primer lugar manifestar solidaridad con los festivales suspendidos por la pandemia, como Cannes, Locarno o Karlovy Vary, reivindicar su importancia económica y cultural y apoyar a todo el sector industrial del cine.
El director de Cannes, con quien en un primer momento se especuló con formas de colaboración con Venecia, aseguró que esta unión “debemos hacerlo por el gran arte del cine”.