Según los datos, la basura es arrojada por los llamados carriteros y personas que llegan en vehículos de todo tipo, convirtiendo el predio en un vertedero clandestino. Este es un problema que se extiende desde hace años; sin embargo, la práctica sigue por parte de inescrupulosos.
Ante la gran cantidad de desechos acumulados, funcionarios de la Dirección de Servicios Municipales de la comuna esteña procedieron una vez más a la limpieza del terreno. “Apelamos a la conciencia ciudadana, y les recordamos que este lugar no está habilitado para arrojar desechos, por ende, si la Policía Municipal de Tránsito constata el delito, procederá a enviar el vehículo al corralón municipal por la infracción”, anunció la Municipalidad en un informe.