Los agentes antidrogas intervinieron un conocido puesto de venta de yuyos en el Área 3 de la capital departamental, donde hallaron varias dosis de crack en poder de Claudio Ozuna (36), conocido como “Rapidito”. Posteriormente, se trasladaron hasta la vivienda del sospechoso, ubicada en el barrio Boquerón II donde tras una verificación minuciosa hallaron más droga.
Los microtraficantes se “reinventaron” durante la pandemia
La comitiva encabezada por el fiscal Elvio Aguilera, informó que requisaron un total de 17,18 gramos de “crack”, distribuidos en 41 dosis listas para su comercialización.
El detenido manifestó a los intervinientes que la droga había comprado del barrio San Miguel de esta capital departamental y que supuestamente era para su hermano adicto.
Los intervinientes contaron que el operativo fue ejecutado tras numerosas denuncias de vecinos que eran testigos de la venta a plena luz del día de “moñitos” de crack y otras drogas a jóvenes de la zona.
El presunto microtraficante y las evidencias fueron trasladados a la Oficina Regional de la Senad, por orden el fiscal interviniente.