WASHINGTON (EFE, AFP). “Ciertamente lo haré y ustedes lo saben”, dijo el presidente Trump cuando uno de los reporteros le preguntó si dejará la Casa Blanca en el caso de que el candidato opositor Joe Biden sea declarado ganador el 14 de diciembre por el Colegio Electoral.
“Lo haré, y ustedes lo saben”, agregó el mandatario, antes de precisar que será “algo muy difícil de admitir porque sabemos que hubo un fraude masivo” en los comicios presidenciales.
El presidente estadounidense insistió en que, si Biden es declarado ganador de los comicios, este hecho se convertirá en “un error " por parte del Colegio Electoral, que es el que tiene que elegir al nuevo mandatario, de acuerdo al sistema indirecto vigente en los Estados Unidos.
Los grandes medios de prensa estadounidenses, alineados abiertamente en contra del presidente Trump, no hicieron hincapié en su denuncia de fraude, sino en que saldría de la Casa Blanca, si el Colegio elige a Biden.
Esto molestó al mandatario, quien publicó un mensaje en su cuenta de Twitter en el que criticaba la interpretación que se hizo de sus palabras.
“Hoy di una larga conferencia de prensa después de desearles a los militares un Feliz Día de Acción de Gracias, y me di cuenta una vez más de que los medios de noticias falsas se coordinan para que el mensaje real de tal conferencia nunca salga. El punto principal que se señaló fue que las elecciones de 2020 estaban AMAÑADAS y ¡YO GANÉ!”, subrayó Trump.
“Biden solo pueden entrar en la Casa Blanca como presidente si puede probar que sus ridículos” 80.000.000 de votos “no fueron obtenidos fraudulenta o ilegalmente. Cuando ves lo ocurrido en Detroit, Atlanta, Filadelfia y Milwaukee, un fraude masivo de votos”, afirmó desde su cuenta de Twitter.
En una media docena de Estados claves, Trump contaba con una significativa, y hasta cómoda ventaja en los votos, hasta que en pocas horas, luego de suspenderse el conteo durante la madrugada, los votos para Biden se incrementaron desproporcionadamente, como lo denuncia la campaña de Trump.
Eso coincidió con la prohibición, en varios sitios, a los veedores republicanos de observar el conteo que se estaba realizando, incluso desconociendo órdenes judiciales.
Además de tapiar los ventanales que daban a recintos donde se realizaban los conteos.
Pese a esta situación, diversos jueces han desestimado varias denuncias de la campaña de Trump, en los estados donde gobiernan los demócratas.
El equipo legal de Trump, comandado por el exalcalde de Nueva York Rudy Giulinai, tiene hasta el 8 de diciembre para desarrollar su estrategia legal.
Ese día todos los estados deberían haber resuelto cualquier disputa y el gobernador de cada territorio debe enviar los resultados certificados al Congreso.
Denuncias principales
Los republicanos sostienen que, a pesar de que se esperaba que el voto por correo sea mayoritario para los demócratas, la proporción observada supera todo lo previsible, y resaltan las diversas irregularidades presentadas en ese forma de votación.
Por ejemplo, el envío de papeletas a ciudadanos no estaban registrados en esa circunscripción; la falta de control de los votos emitidos con esa modalidad; así como el voto de personas fallecidas.
Pero, la denuncia más fuerte es el uso de máquinas informáticas presuntamente amañadas para restar votos a Donald Trump en beneficio de Joe Biden.