Muere en combate comandante de infantería en el este de Libia

Trípoli, 27 jul (EFE).- El oficial libio Muhamad al Kani, que dirigía la Novena Brigada de Infantería de la ciudad de Tarhuna, bajo el mando del mariscal general Jalifa Hafter fue asesinato esta madrugada junto a otros dos milicianos en su residencia del distrito de Buatni en la ciudad oriental de Bengasi, informó hoy a Efe una fuente de seguridad de esta ciudad.

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La fuente de seguridad precisó que Al Kani fue asesinado por milicianos bajo el mando del hijo de Hafter en un granja donde reside en Bengasi, durante una redada acompañado por Abdelbari al Shaqaqi y Walid al Bashir mientras que otro miliciano Walid al Bashir fue detenido.

"En principio iban a arrestarlo ya que está buscado por la Corte Penal pero Al Kani se resistió y abrió fuego, pero fue abatido durante el intercambio de disparos", precisó la fuente local.

Al Kani, responsable de las múltiples matanzas en la ciudad de Terhuna, situada a 90 kilómetros al sureste de Trípoli, asumía el mando de la Novena Brigada conocida por "Al Kaniyat" que pertenece a las fuerzas de Al Karama (Dignidad) -leal al mariscal Hafter- en la guerra de Trípoli tras el asesinato de su hermano Mohsen al Kani en un ataque con drones turcos.

"Hafter lleva a cabo operaciones similares para eliminar a los milicianos buscados por la Corte Penal internacional (CPI) acusados de crímenes de guerra en el país", estimó, por su parte, otra fuente de seguridad local.

Hafter, líder militar y tutor del antiguo Gobierno no reconocido en el este del país (encabezado por el Parlamento de Tobruk), incorporó a sus filas a miles de mercenarios rusos, sudaneses, chadianos y árabes, que todavía están en Libia.

Su salida del país es uno de los puntos que se consideran cruciales para que se mantenga la paz y conseguir celebrar las próximas elecciones bajo auspicios de la ONU sin miedo a que influyan de una u otra manera en el voto.

Desde el mes de marzo, el poder está en manos del Gobierno de Unidad Nacional (GNU), elegido por el Foro para el Diálogo Político para Libia (FDPL), un organismo no electo creado por la ONU al margen de los gobiernos hasta entonces enfrentados y que debe unificar el país, mantener el alto el fuego y conducirlo hasta las elecciones.

Libia es un Estado fallido, víctima del caos y la guerra civil, desde que en 2011 la OTAN contribuyera al triunfo de los distintos grupos rebeldes sobre la dictadura de Muamar al Gadafi, y en el que han muerto más de 8.000 personas en los distintos conflictos.

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