En una entrevista con el periódico catalán La Vanguardia, Salmond, al frente del ejecutivo escocés cuando se fraguó el referendo, asegura que él no tiene "una fórmula mágica" para alcanzar la independencia, pero sí subraya cómo "persuadió al Estado británico para que aceptara" la votación, lo que no fue "fácil".
"Llevó décadas, muchos, muchos años para llegar a la situación de celebrar el referéndum. No esperes que tu oponente esté de acuerdo inmediatamente. Tienes que convencerle de que la alternativa al acuerdo es menos aceptable que un acuerdo, es más incómoda, más un problema político", agrega.
También afirma que "la clave es, por supuesto, la aceptación internacional", puesto que "te conviertes en un Estado independiente cuando todo el mundo dice que lo eres", y añade que "no existe el concepto de referéndum ilegal".
Pese a asegurar que no quiere decir "a los catalanes qué tienen que pensar y hacer", reprende en la entrevista a las fuerzas independentistas por no haber "terminado" lo iniciado en octubre de 2017 (el intento secesionista de esa región española que terminó con varios líderes independentistas encarcelados y otros fugados): "Si preparas y movilizas a la gente con la expectativa de éxito, tienes que terminarlo. No puedes empezarlo y no acabarlo".
La actual primera ministra escocesa, Nicola Sturgeon, ha fijado el 19 de octubre de 2023 como la fecha en la que tendrá lugar un nuevo referendo de independencia en Escocia, si bien, al menos de momento, la eventual consulta no cuenta con el beneplácito del Gobierno británico.
Salmond ya no forma parte del Partido Nacional Escocés (SNP) que encabeza Sturgeon sino que lidera el Alba Party, un partido también independentista pero muy minoritario.