Las fotos, publicadas este domingo por la agencia estatal KCNA, muestran a Kim Jong-un en varias poses al lado de una niña, quien se cree que es su hija mediana y llamada Kim Ju-ae, vestida con un abrigo negro y cuya apariencia física recuerda a la de la primera dama, Ri Sol-ju.
La KCNA menciona que en las fotos aparece el líder supremo “con su querida hija” y con militares y científicos “que contribuyeron al lanzamiento de prueba exitoso del Hwasong-17″, un test llevado a cabo el pasado día 18 y que supone otro importante avance para el programa armamentístico del régimen.
Durante el acto conmemorativo del último test armamentístico de Pionyang, Kim también se mostró confiado en que “las capacidades auto-defensivas norcoreanas alcanzarán la posición de las más fuertes del mundo”, algo que se logrará “siempre que la determinación y el espíritu de lucha estén claros”, según dijo.
Esos objetivos se lograrán “con el amplio ejército de científicos y técnicos intensamente leales al Partido” y con “las valientes municiones de trabajadores y el apoyo absoluto del pueblo”, señaló el líder en una de sus habituales declaraciones, recogidas por la KCNA.
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Declaraciones de Kim Jong-un
“La historia ha enseñado que solo cuando nos convertimos en los más fuertes, no en débiles, podemos defender el presente y el futuro del país y de la nación en un mundo como el actual donde la fuerza en el combate decide la victoria”, destacó Kim.
Añadió que trabajará en ese sentido para “consolidar la mayor fuerza” de forma “absoluta y irreversible para el país”, y que continuará “reforzando de forma ilimitada las capacidades defensa” norcoreanas.
Los medios norcoreanos mostraron a la hija del líder por primera vez el pasado día 19 en imágenes de esa mencionada prueba de un misil balístico intercontinental explicando solamente que Kim supervisó el lanzamiento “junto con su querida hija y esposa”, sin ofrecer más datos.
En aquella primera aparición pública de la niña se la podía ver con un abrigo blanco escuchando a su padre mientras daba instrucciones a funcionarios, contemplando junto a Kim el misil en su fase de despegue o caminando de la mano con él junto a la lanzadera del proyectil.
Los medios norcoreanos rara vez difunden información sobre los familiares cercanos de la dinastía Kim, que gobierna el país con mano de hierro desde los años cuarenta, y la niña no había sido hasta ahora una excepción, puesto que la propaganda nunca antes había siquiera reconocido su existencia.