El portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, explicó este miércoles en la rueda de prensa diaria en la sede central que el ataque tuvo lugar a primeras horas de la mañana del lunes pasado en la localidad de Rumamier, situada al sur de la región de Abyei.
Un grupo de unos 200 hombres armados de los que se desconoce su filiación atacaron el poblado, mataron a 13 personas y dejaron heridas a 5 más, y quemaron al menos 27 viviendas antes de retirarse.
La misión de la Unisfa, alertada del ataque, llegó horas después y desplegó a sus soldados para tratar de garantizar la seguridad a todos los habitantes que habían huido de sus hogares ante el ataque.
La región de Abyei es un "área administrativa especial" de 10.000 kilómetros cuadrados, considerada un "condominio" gestionado conjuntamente por los Gobiernos de Sudán y Sudán del Sur.
Rica en petróleo, la región tiene pendiente un referéndum -ahora pospuesto sine die- para decidir su integración con uno de los dos países, y en los últimos años ha sufrido esporádicos brotes de violencia, así como la toma por la fuerza durante un breve periodo por el Ejército del norte.