A consecuencia de la incidencia, que supuso que las operaciones de check-in y embarque tuvieron que hacerse de manera manual, se cancelaron nueve vuelos y otros quince sufrieron retrasos de una hora o más, según informó el propio aeropuerto a la prensa local.
El aeropuerto preveía este sábado la salida de 35.000 pasajeros.
"El proveedor de servicios está trabajando activamente en una solución y está intentando resolver el problema lo antes posible", declaró a medios belgas la portavoz Ihsane Chioua Lekhli.
De ese modo, aconsejó a los pasajeros con vuelo este sábado 20 de septiembre que verifiquen el estado de su vuelo con su aerolínea antes de desplazarse al aeropuerto y sólo acudir si su vuelo está confirmado.
El aeropuerto londinense de Heathrow, el mayor de Europa, también informó este sábado que su proveedor de facturación y embarque experimenta un "problema técnico" que podría causar demoras a los pasajeros de salida.
Por otro lado, el aeropuerto de Berlín-Brandeburgo, en Alemania, también se vio afectado por un ciberataque el viernes por la noche que generó tiempos de espera más largos en la facturación y el embarque, así como retrasos.