En un comunicado, la UA señaló que Youssouf "toma nota de las elecciones municipales celebradas en Mogadiscio" este jueves y "felicita al pueblo somalí por la calma y el orden en el desarrollo del proceso".
Estos comicios constituyen "un importante primer paso en los esfuerzos continuos de Somalia por promover la gobernanza democrática en todo el país", subrayó el jefe de la Comisión (secretariado).
"Los procesos electorales a nivel municipal -indicó- contribuyen al fortalecimiento de la gobernanza participativa y ofrecen una valiosa experiencia a medida que Somalia avanza en su trayectoria política y electoral de liderazgo nacional".
Con ese espíritu, el presidente alentó a todos los actores políticos somalíes a seguir participando "de forma constructiva mediante el diálogo y la consulta inclusiva, de manera que se apoye la unidad nacional y la estabilidad a largo plazo".
Youssouf reafirmó el "compromiso constante" de la UA de acompañar al pueblo somalí en sus esfuerzos por "fortalecer la gobernanza inclusiva y promover una paz y una estabilidad duraderas".
Con la excepción de votaciones en la región semiautónoma de Puntlandia y la región separatista de Somalilandia, Somalia celebró por última vez elecciones directas en 1969, meses antes de que el general Mohamed Siad Barre tomara el poder en un golpe de Estado.
Tras la caída de Barre, se instauró un sistema indirecto basado en clanes, cuyos representantes eligen a los legisladores, quienes, a su vez, seleccionan al presidente del país.
Las elecciones de este jueves no determinarán, sin embargo, al alcalde de Mogadiscio, quien también se desempeña como gobernador de la región central de Banadir, pues la designación de ese cargo corresponde al presidente somalí.
Organizados por el Gobierno somalí, los comicios han contado con el rechazo de partidos opositores, que los tachan de defectuosos e imparciales.
En 2024, el Parlamento de Somalia aprobó enmiendas constitucionales que introducen por primera vez desde 1969 el sufragio universal directo, aunque está por ver si se aplicará en las elecciones presidenciales previstas en 2026.
Somalia vive en un estado de conflicto y caos desde el derrocamiento de Barre en 1991, lo que dejó al país sin gobierno efectivo y en manos de milicias islamistas, como Al Shabab, y señores de la guerra.