Desde el referido gremio consideran que la reactivación del consumo no se dará con una medida simplista, sino con una “batería de acciones” que debe incluir más de 10 acciones. Entre ellas, actualizar ley de tarjeta, aprobar ley de factoraje, créditos hipotecarios, APP y achicamiento del Estado.
Jorge Mendelzon, titular del gremio, detalló como primer punto que desde el sector público se debe seguir invirtiendo en rubros que generan mucha mano de obra, como las construcciones, pero lo más importante es dar la confianza y previsibilidad. “No tenemos claro cuál es el rumbo, las compras de insumos que se hicieron nunca se aclararon y esto lo que hizo fue que la incertidumbre afecte al capital y al consumo”, dijo Mendelzon
En ese sentido, indicó que el Gobierno, y el Ejecutivo principalmente, debe determinar claramente dónde quiere llevar al país y transmitir mensajes claros y no contradictorios. “Demostrar un fuerte liderazgo, yo creo que eso es lo que los agentes de decisión requieren para poder lanzarse con más seguridad y certeza a hacer las inversiones”, apuntó el empresario.
El siguiente punto tiene que ver con modificar la ley de tarjetas. Esta ley que rige desde 2015 hizo por un lado que el financiamiento sea más barato con esta herramienta, pero al no ser atractivo para los bancos, una gran franja quedó fuera de este producto y del sistema formal. De hecho, los datos indican que muchas personas, al no contar con tarjetas, se volcaron a préstamos de casas de crédito que tienen tasas usurarias.
Por otra parte, los créditos hipotecarios deben ser flexibilizados, sobre todo para la construcción de viviendas en el sector privado. Hoy están esos productos financieros, pero no tienen el alcance que se necesita para que tengan el peso de contribución a la reactivación.
Otro punto relevante es la seguridad jurídica. El Servicio de Catastro, dependiente de Hacienda; y la Dirección de Registros Públicos, que está en la estructura del Poder Judicial, deben transparentarse.
También detalló que los protocolos sanitarios deben ser iguales para todos. Hoy, no todos los negocios cumplen con los protocolos. Los informales no los respetan y eso pone en riesgo lo logrado en estos meses con tantos sacrificios.
El gremio insta también a utilizar la herramienta de la APP. “Creemos que es un momento muy oportuno para insistir con las Asociaciones Público-Privadas. El Estado no tiene todos los recursos que se necesitan para inversiones que faltan para reactivar la economía”, señaló. El combate a la inseguridad es otro tema no menor. Desde el secuestro en el norte, el incremento de crímenes en los barrios y casas. “La gente tiene miedo, la gente no sale, la gente no gasta”, acotó.
Los desencuentros y contradicciones entre entes públicos en torno a temas tan sensibles como el Presupuesto es otro punto. Por un lado, Hacienda habla de un presupuesto 2021 austero, pero ministros del Ejecutivo piden aumentos por su cuenta, eso debe cambiar.
También se debe avanzar en una reforma real para achicar el Estado. “Nuestro déficit llegaría al 7% y la deuda supera 30% del PIB. Ya no hay forma de seguir dilapidando el presupuesto. Es momento de decir basta, de avanzar hacia la reforma real”, resaltó Mendelzon.
Otra acción es la lucha frontal anticontrabando y productos falsificados. “Tenemos que entender que ese pequeño local frente al local formal le está restando empleo con seguridad social a los paraguayos”, dijo.
Finalmente, la Ley de factoraje, para que las empresas, grandes y pequeñas, puedan descontar legalmente las facturas y hacerse de capital operativo. Hay un proyecto al respecto que espera reglamentación.
Índice todavía en franja pesimista
El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) mostró un leve avance en agosto último, al ubicarse en 43,8 puntos frente al 42,6 puntos de julio pasado, de acuerdo con los últimos datos del BCP. Los consumidores observan una recuperación gradual de la economía, aunque todavía está en la franja pesimista a causa de los altos contagios y cierres parciales.
El informe del ICC recoge la percepción de pesimismo que se vive aún en los hogares consultados hacia una reactivación económica tras la pandemia.