Antonia Caballero (56), la que “formó” su hogar con su pareja en el sitio, dijo que no tuvieron otra opción ya que no quieren estar retirados de su “puesto” que es “cuidar coches”.
El lugar que ocupan está abarrotado de restos de camas, colchones y otras cosas que utilizan como mobiliarios y con las cuales se defienden. Emplean como techo unas carpas y hasta tienen su propio portoncito con llaves. Al ser consultada sobre el baño que utiliza, la mujer dijo que pagan un sitio que está cerca.
Sostuvo que tiene hijos, pero que estos viven en el interior del país y que tampoco tienen capacidad para ayudarla. “Aquí es mi lugar de trabajo. Estoy fichada en la Municipalidad. No quiero que me saquen o lleven lejos”, manifestó. Los vecinos alertaron de la situación y piden que alguna institución despeje la zona ocupada por la pareja.