El pabellón fue instalado por funcionarios de la Secretaria de Emergencia Nacional (SEN) atendiendo a que muchos parientes de pacientes estaban a la intemperie y había posibilidades de que haya lluvias y reducción de temperatura.
En tanto, el programa “Paraguay Solidario” de la Oficina de la Primera Dama llevó porciones de comida a los familiares, tal como lo viene haciendo en otros centros asistenciales.
La colocación de la carpa fue calificada por los allegados de los internados como “afrenta”, considerando que día a día deben lidiar con falta de insumos y medicamentos esenciales para que mejoren sus enfermos.
Para expresar su indignación, algunos escribieron lo siguiente por la tienda: “En vez de carpas, queremos remedios”, “Midazolán y Atracurio” y “Marito p...”.
Los familiares padecen además la falta de reactivos laboratoriales para medir ferritina, dimero D y otros en la sangre, servicio por el cual deben pagar a firmas privadas. Para solventar los gastos, apelan a la solidaridad, hacen polladas y otras actividades. Hubo familias que tuvieron que vender o empeñar su coche, vivienda u objetos personales.