Iglesia denuncia “cultura de la muerte”

El arzobispo de Asunción, monseñor Edmundo Valenzuela, cuestionó la postura -incluso señalada desde la misma ONU- a favor del aborto en el caso de la niña de 10 años embarazada. Alertó sobre “la barbarie, deshumanización y cultura de la muerte”.

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Edmundo Valenzuela ofreció esta mañana el oficio religioso durante el tedeum, en la Catedral Metropolitana, en el marco de los festejos por los 204 años de la Independencia Nacional.

El líder religioso aprovechó la ocasíón para referirse al reciente pronunciado desde la Organización de Naciones Unidas (ONU), que el lunes último denunció la inacción del Gobierno de Paraguay ante el caso de la niña embarazada, producto presuntamente de una violacíon por parte de su propio padrastro.

El arzobispo capitalino advirtió que “la violación de la soberanía de un país o un Estado puede tener trágicas consecuencias, que debemos y podemos evitar con mutuo respeto y diálogo sincero”. Pidió “no ceder jamás ante el chantaje y las presiones políticas”. Abogó por la defensa de la vida humana en todos sus aspectos, ya que “es la mayor riqueza que Dios nos regala”. “Tanto la Iglesia como la sociedad tienen el deber de cuidar sus vidas, en esta época de constantes manipulaciones del lenguaje”, expresó.

Siguiendo sobre el pronunciamiento de los organismos internacionales a favor de interrumpir la gestación, Valenzuela advirtió que la intención es extender la “barbarie”. “Esto es un retroceso hacia la barbarie y la deshumanización; todo es relativo, es lo que llamamos la cultura de la muerte”, sostuvo. Criticó a las organizaciones no gubernamentales que igualmente -bajo el argumento de defender la vida de la niña de 10 años- pidan e incluso exijan interrumpir el embarazo y eleven su voz de protesta hacia el exterior. “Nos da pena una globalización promocionada por ciertas personas, quienes en nombre de la ONU, contradiciendo sus nobles inicios, han distorsionado la imagen de nuestro país”, manifestó.

Consideró que se busca “crear una nueva cultura, totalmente ajena a la nuestra, donde la construcción de la persona se realiza sobre valores humanos y cristianos”. Aseguró que propagan un “concepto manipulado de libertad, más bien meramente individual y caprichoso”. “Son idelogías sin ningún fundamento ético ni científico”, agregó. El arzobipo señaló la polémica y discusión que se generaron con el caso de la niña abusada y embarazada y los pedidos de aborto.

“Pareciera que no existen otros problemas que reducir la natalidad y aprovechar todo tipo de conductas desordenadas, ya que se ocupa toda la agenda social, mediante el asalto cultural y la legislación de muchos intereses”, refirió. Volviendo al tema de los festejos patrios, abogó por apreciar, valorar y defender los recursos naturales. “Cada uno debe sentir responsabilidad por conservar lo nuestro, empezando por las personas, por las vidas que son valiosas desde la Concepción hasta la muerte natural”, insistió.

El reclamo de varios sectores sobre la interrupción del embarazo surgió luego de que se señalara la corta edad de la niña y que su condición es producto de un abuso sexual. El Ministerio de Salud señaló que hasta el momento la menor se encuentra en buen estado de salud y adelantó su postura contra el aborto, si la gestación puede llegar a buen término. Las autoridades sanitarias reconocen que se trata de un embarazo de alto riesgo, pero aun así insisten en que es “viable”.

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