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El hombre, quien dijo llamarse Rodolfo Benítez, es candidato a la concejalía por el Partido de la Juventud y fue quien encabezó la turba de campesinos autodenominados sintierras que intentó impedir la verificación y destrucción de viviendas precarias y cultivos de marihuana en una parte de las tierras que pertenecen a indígenas Aché y que fueron invadidas por los labriegos, que argumentan tener títulos de propiedad que los avalan como dueños.
A pesar del intento de los supuestos campesinos, agentes de la Senad consiguieron destruir gran parte de los cultivos de marihuana que se encontraban a escasos 80 metros de las precarias casas levantadas supuestamente por los primeros.
El político dijo ante los fiscales de Curuguaty Christian Roig, de la Unidad de Lucha Contra el Narcotráfico; y Jorge David Romero, de la unidad Ambiental, que es candidato a concejal municipal. Esta situación llamó poderosamente la atención a las autoridades intervinientes.
La comitiva, que estaba también integrada por los funcionarios de la Secretaría del Ambiente (Seam), Instituto Forestal Nacional (Infona) y la Policía, pudo corroborar que había maderas aserradas, zonas deforestadas y otros delitos.
Los Aché exigen que los labriegos salgan de sus tierras, mientras que los labriegos se niegan alegando que tienen autorización de los funcionarios del Indert para ingresar e instalarse allí, por lo que el fiscal Roig pedirá un informe a la mencionada institución estatal.
Cuatro viviendas precarias fueron destruidas y quemadas por los nativos. Durante el procedimiento además se hallaron ropa camuflada, proyectiles de revólver calibre 45 y de escopeta calibre 28mm.