Si te gusta escribir, seguramente alguna vez fantaseaste acerca de que tus relatos se vuelvan realidad. Sin embargo, ¿ya imaginaste lo que puede pasar si las historias de un autor como Stephen King se materializaran?
En la serie Marianne, la protagonista se enfrenta a una situación similar. Durante su adolescencia, Emma Larsimon era acosada en sus sueños por una bruja. La joven puso freno a sus pesadillas cuando comenzó a plasmarlas en papel, produciendo una aclamada saga de relatos ficticios en los que un alter ego vencía al espíritu maligno.
Cuando Emma publicó el último volumen de sus narraciones, las pesadillas y los fantasmas del pasado volvieron a atormentar su vida con más fuerza, pues el descubrimiento de que la villana de sus libros existió en la vida real la trastornó. Con esta consigna, la cadena de sucesos extraños que desarrolla la serie consigue buenos sustos sin la necesidad de recurrir a una cantidad exagerada de screamers.
Sin promoción previa, el viernes 13 de este mes, los usuarios de la plataforma conocieron a Marianne, una bruja sin escoba ni sombrero puntiagudo, pero con grandes dotes para el susto y un amor incondicional al diablo. Esta ficción francesa cuenta con ocho capítulos, cuya extensión ronda entre los 30 y 50 minutos.
Aunque en el campo del terror es complicado concebir ideas que asusten en verdad y sean innovadoras, esta propuesta cuenta con la imponente y petrificante presencia de la actriz Mireille Herbst Meyer, quien encarna a una de las personas que poseyó Marianne. La artista pone los pelos de punta, ya sea sonriendo como “dulce anciana” o simplemente estando seria.
Con su mirada inquietante, sonrisa repulsiva y vida solitaria, el personaje interpretado por Mireille prometía ser un nuevo ideal de maldad; sin embargo, la serie desplaza este elemento a medida que van pasando los capítulos. En el clímax de la filmación, aparece la verdadera forma de Marianne, cuya apariencia “demoníaca” deja al espectador con un mal sabor en la boca, pues la actriz real consiguió mejores sustos que el espíritu creado por computadora.
¡Spoiler, alert! El final de la serie ahoga a la audiencia en un mar de dudas acerca de la existencia de una segunda temporada, debido a la posibilidad de que un demonio haya dejado su semilla, aunque Marianne no vuelva a molestar. Si aún no viste la serie, ¿qué esperás para hacerlo?, si ya conocés la historia, ¿preguntaste a tus amigos si alguno de ellos es Marianne?
Por Belén Cuevas (17 años)