Se trata de “una historia de tres generaciones que andan tiricientas: Ita, Justa y Alicia (abuela, madre e hija), que en diferentes tiempos han padecido, tolerado y permitido el abuso, arrastrando con ello la enfermedad. Alicia decide romper con ese círculo y no heredarlo a una generación más”.
Luego de la exhibición se abrió un debate sobre el abuso de niñas, las desigualdades y todo lo que aun falta por hacer para que los derechos de las mujeres sean garantizados y respetados. Finalmente, las invitadas disfrutaron de comidas típicas mexicanas como chilaquiles, taquitos y otras.