Durante el desarrollo de nuestras actividades cotidianas, debemos respetar ciertas normas impuestas por la sociedad con respecto a modos de comportamiento frente a varias situaciones. En este sentido, una de las enseñanzas que circula corresponde al buen trato con otras personas en cualquier ámbito de la vida a pesar de exponernos a ciertas frustraciones.
Los alimentos que consumimos y la forma en que los combinamos y nos alimentamos tienen sus efectos directos en lo que respecta a como nos sentimos física y emocionalmente. Lo importante es comer de forma equilibrada y variada y, por supuesto, conocer cómo puede afectarnos el consumo de algunos productos que incluimos en nuestros platos día a día.
La veterinaria Adriana González dice que una forma de determinar si tu gato está estresado es observar las situaciones desde su punto de vista. “Si bien tener un invitado puede ser emocionante para el dueño, es un olor nuevo, una persona nueva y una interrupción en la rutina del gato”.
Pasada la Nochebuena, la efervescencia de las fiestas de fin de año todavía sigue alta. Es una época de celebración, de conclusión de ciclos y balances. Pero también es la época en que suceden la mayor cantidad de suicidios, feminicidios y episodios de violencia intrafamiliar. ¿Cómo cuidarse y cuidar a los demás de las consecuencias de este estado de exacerbación que en ocasiones lleva a decisiones y acciones extremas?
La nutricionista Shirley Cardozo dice que comer no es un problema, es una necesidad. A veces dicen “tengo un problema, estoy comiendo mucho”. “Pero comer mucho no es el problema, es la respuesta al problema que se esconde detrás. Generalmente problemas con relaciones interpersonales, altos niveles de estrés, exceso de autocontrol (dietas muy restrictivas), etc.”
Sobrepensar es parte de un “hábito mental” desde el cual gestionamos las obligaciones, las actividades, nuestra alimentación, agenda personal y laboral.