Los puntos a ser modificados en la Ley N° 5098 de Responsabilidad Fiscal fueron debatidos nuevamente ayer en una reunión convocada por el ministro de Hacienda, Benigno López, a fin de conseguir apoyo para la aprobación del proyecto que será presentado en abril al Congreso Nacional.
De la reunión participaron los exministros de Hacienda César Barreto, Manuel Ferreira y Santiago Peña; el extitular del Banco Central del Paraguay Carlos Fernández Valdovinos; las integrantes del Consejo Fiscal Asesor Flora Rojas y Leticia Carosini; el actual presidente del BCP, José Cantero, y el viceministro de Economía, Humberto Colmán.
El viceministro Colmán ofició de vocero y explicó que en general hay acuerdo entre todos los participantes sobre la pertinencia de llevar a cabo los cambios para fortalecer el sistema fiscal.
Dijo que la idea es contener aún más el gasto corriente, por lo que a la primera medida anunciada de bajar su crecimiento: de inflación más 4% a inflación más 2%, se le sumará que los beneficios complementarios al salario (subsidio, bonificaciones y otros) no deben ser aumentados más del reajuste del sueldo mínimo, así como está establecido para el salario. Aseguró que con esta medida se limitará el crecimiento de estos beneficios, porque actualmente existen entidades que pueden subir de manera discrecional en un 30% a 40%, lo que ya no sucederá al establecerse esta disposición.
En lo que respecta a flexibilizar las reglas para superar el tope de déficit fiscal, Colmán ratificó que se mantiene el límite de 1,5%, pero en caso excepcional hasta 3% para aplicar medidas contracíclicas cuando la economía así lo requiera. En ese sentido, dejó en claro que la ley –de aprobarse en el Congreso– ya establecerá los requisitos a ser cumplidos para activar la cláusula de escape para superar el tope de saldo rojo, sin necesidad de una nueva ley especial.
Explicó que en el caso de que se requiera financiar el déficit con un nuevo préstamo o emisión de bonos, sí se recurrirá al Congreso para solicitar la aprobación, pero que esto no necesariamente sucederá siempre (el año pasado ya se tenían los fondos y no hubo necesidad de pedir la aprobación de nuevos préstamos al Legislativo).