BUENOS AIRES (EFE). Si se repiten los resultados de las primarias, Fernández –que aventajó a Macri por 16%– tomará las riendas del poder el próximo 10 de diciembre sin necesidad de una segunda vuelta, prevista para el 24 de noviembre en el caso de que ninguno de los candidatos alcance el 45% de los votos o más del 40% y diez puntos porcentuales de ventaja sobre el segundo más votado.
Pero Macri, de 60 años, anunció que dará batalla a pesar del voto de castigo que sufrió en las elecciones primarias por su gestión de una economía en recesión desde hace un año y medio, con una inflación disparada que se espera que termine el año en una tasa cercana al 55%, una de las más altas del mundo, y elevados índices de pobreza (35,4%) y desempleo (10,6%).
A Macri tampoco le ha ayudado el ajuste fiscal puesto en marcha tras el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional para un auxilio financiero por un total de US$ 56.300 millones, el mayor en la historia de este organismo.
Animado por las multitudinarias marchas que le han arropado en su campaña del “Sí, se puede”, Macri confía en lograr más votos en las urnas y en que una mayor fiscalización de la votación, sumado a que la tasa de participación de estos comicios sea superior a la de las últimas elecciones, lo ayude a forzar una segunda vuelta.
La incertidumbre sobre el rumbo que tomará la economía tras los comicios también ha hecho mella esta semana en los mercados y han vuelto las filas en los bancos de los ciudadanos que buscan proteger sus ahorros y se vuelcan a comprar dólares.
¿Unidad del peronismo?
En el peronismo no tienen duda de que la crisis económica pasará factura a Macri. La jugada maestra de Cristina Fernández, quien afronta varias causas judiciales por presunta corrupción durante su Gobierno, de ceder la candidatura presidencial a Alberto Fernández, jefe de Gabinete durante todo el Gobierno de Néstor Kirchner (2003-2007) así como durante los primeros meses de su primer mandato, también ha rendido sus frutos.
Fernández, que se fue del Gobierno de Cristina en 2008 y desde entonces se había convertido en uno de los mayores críticos de su gestión, ha conseguido atraer a un voto más moderado del que tiene la expresidenta, que ha estado casi ausente en esta campaña consciente de que su figura despierta animadversión en un parte del electorado.
El tercer mejor posicionado, según las encuestas, es Roberto Lavagna, quien fue ministro de Economía en abril de 2002, durante el gobierno de transición del peronista Eduardo Duhalde (2002-2003). Logró que la economía argentina revirtiera la tendencia negativa.
Sea quien sea el eventual vencedor de los comicios hoy o, si se da el caso, en balotaje, tendrá que lidiar con un complejo escenario económico, y el reto más urgente será renegociar la deuda que asfixia Argentina.
Voto argentino en Paraguay
El escrutinio provisional –aseguró el gobierno– será “ágil y transparente”.
Los resultados del conteo rápido empezarán a difundirse hoy mismo desde las 21:00, con vistas a tener contabilizado el 90% de las mesas de votación antes de la medianoche.
En Paraguay, los argentinos podrán concurrir para depositar sus votos en la sede del consulado ubicado sobre la avenida Aviadores del Chaco.
Según la Embajada de Argentina, unos 15.000 argentinos están habilitados para sufragar tanto en Asunción como en Ciudad del Este y Encarnación. El horario es de 8:00 a 16:00. Deberán portar el DNI.
Los paraguayos con documento argentino que vivan en el vecino país también podrán votar para los cargos regionales.