“Hiyab es la religión. Es decir, no hay duda sobre la obligación del hiyab, todos lo deberían saber”, dijo Jameneí, que rechazó las dudas planteadas al respecto por parte de diferentes capas de la sociedad en los últimos meses.
Subrayó que “no cabe ninguna duda; es una obligación religiosa que debe ser respetada”, informó la web oficial de Jameneí.
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En una reunión con mujeres activistas sociales y culturales con motivo del aniversario del nacimiento de la hija del profeta del islám, Fatima, Jameneí precisó que “aquellos que no cumplen completamente con el hiyab no deben ser acusados de irreligiosos y contrarrevolucionarios”.
Jameneí asimismo dijo que “los hipócritas reclamantes occidentales” y la “cultura occidental decadente” han cometido un crimen contra la dignidad de la mujer y expresó su esperanza de que el islam pueda influir en su mentalidad.
Jameneí dijo que las mujeres en occidente fueron arrastradas del hogar a las fábricas
“El objetivo principal de plantear el tema de la libertad de las mujeres en Occidente era arrastrarlas del hogar a las fábricas para usarlas como mano de obra barata”, apostilló Jameneí.
Las protestas en Irán comenzaron a mediados del pasado mes de septiembre y reclamaban más libertades sociales, tras la muerte bajo custodia policial de una joven kurda que la habían detenido por llevar mal colocado el velo islámico.
Un numero notable de las mujeres en la capital iraní, Teherán, han dejado de llevar el velo islámico.
El pasado mes de diciembre, las autoridades del país islámico informaron de que han suprimido la policía de la moral, fuerza que vigilaba la vestimenta de las personas y las detenía.
Jameneí confirmo la obligación de los códigos de vestimenta
Pero destacaron que solo el modo de enfrentarse a los infractores va a ser diferente y que siguen siendo obligatorios los códigos de vestimenta.
El pasado domingo 1 de enero, la agencia local iraní de noticias Fars informó de que la policía en todo el país ha retomado la puesta en marcha de un plan que había quedado abandonado durante las protestas.
El mismo consiste en el envío de mensajes a los propietarios de automóviles en cuyos coches se desplazan mujeres que no respetan correctamente el velo islámico