“Nosotros no somos la parte que inicia la guerra; responderemos a cualquier amenaza con todas nuestras fuerzas”, aseveró el jefe de Estado Mayor de Fuerzas Armadas de Irán, el general de división Mohamad Baqeri.
El jefe militar se refería a la respuesta del líder supremo iraní, Ali Jameneí, a la carta enviada por el presidente estadounidense, Donald Trump, en la que llamaba a negociaciones a Teherán, amenazando con una acción militar si no acepta su oferta.
Baqeri dijo que el país no realizará negociaciones directas con EE.UU. sobre su programa nuclear, “pero no hay nada malo en llevarlo a cabo de manera indirecta”, según informó la agencia IRNA.
El alto cargo militar señaló que en su respuesta, Irán denunció a Trump como “la parte más deshonesta y renegada en las negociaciones pasadas y, por lo tanto, no confiamos en usted”, una referencia a la decisión del republicano de salirse del acuerdo nuclear de 2015 de manera unilateral y de reimponer las sanciones contra Teherán.
Política nuclear
El jefe militar dijo que Teherán le ha asegurado a la parte estadounidense que su programa nuclear tiene solo fines pacíficos y que no busca fabricar armas nuclear.
“No buscamos armas nucleares, sino satisfacer las necesidades de nuestra nación en materia de la energía nuclear”, afirmó Baqeri.
No obstante, desde el Parlamento iraní hubo llamadas hoy a la fabricación de armas nucleares para enfrentar la “intimidación y las demandas excesivas” de Trump.
“La única manera de enfrentar su intimidación y sus demandas excesivas es avanzar rápido y sin demora hacia la construcción de armas nucleares como elemento disuasorio”, sugirió el parlamentario durante cuatro legislaturas Mohammad Qasim Osmani, según el diario Entekhab.
En este sentido, el lunes pasado, Ali Lariyaní, uno de los asesores del líder supremo de Irán, dijo que su país se vería forzado a desarrollar armas nucleares si es atacado por EE.UU. o Israel.
Irán mantiene desde hace décadas que su programa nuclear tiene un uso exclusivamente civil y pacífico, en medio de las sospechas occidentales de que busca armas atómicas.
Jameneí, la máxima autoridad religiosa y política de la República Islámica de Irán, emitió una fatua -dictamen religioso- que declaró “haram” (prohibido) las armas nucleares y biológicas en 2003.
Pero periódicamente surgen voces ultraconservadoras que piden que el país se arme nuclearmente, en momentos de grandes tensiones entre Irán y Estados Unidos o Israel.
Polémica insinuación
El principal periódico ultraconservador de Irán, Keyhan, cercano al líder supremo, insinuó ayer que el mandatario estadounidense será tiroteado en cualquier día en venganza por el asesinato del comandante de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria iraní, Qassem Soleimani, en un ataque estadounidense con drones en el aeropuerto de Bagdad en enero de 2020.
“Cualquier día, en venganza por la sangre del mártir Soleimani, le dispararán unas cuantas balas en esa cabeza hueca y beberá del cáliz de una muerte maldita”, instigó Keyhan, cuyo editor jefe, Hosein Shariatmadari, es el representante de Jameneí.
En enero pasado, el periódico ultraconservador criticó al presidente iraní por negar en una entrevista con la cadena estadounidense NBC que Teherán haya intentado o que tenga la intención de asesinar a Trump, e insistió en tomar venganza por el asesinato del general iraní.
En noviembre pasado, el Departamento de Justicia de EE.UU. acusó a Farhad Shakeri, afgano residente en Teherán, de un complot para asesinar a Trump, en el marco de “continuos intentos del gobierno iraní de atacar a los estadounidenses”, incluido el actual inquilino de la Casa Blanca, algo que Irán rechazó.