"Las imágenes difundidas por el ministro terrorista sionista extremista Ben-Gvir, que exhiben los abusos y la tortura sistemáticos contra los detenidos palestinos en las cárceles de la ocupación, incluyendo amenazas de ejecución, encarnan el comportamiento sádico y fascista que la entidad terrorista de ocupación practica contra nuestros heroicos prisioneros y nuestro pueblo palestino", dijo Hamás en un comunicado.
Las imágenes, donde se ve al ministro mirando una celda en la que hay tres presos maniatados, arrodillados y con la cabeza en el suelo, fueron difundidas la noche del miércoles en canales palestinos, y el ultraderechista pide en ellas la pena de muerte para los presos palestinos.
Gvir reiteró el martes que "las condiciones para los terroristas (en referencia a los prisioneros palestinos) en prisión seguirán siendo las mínimas permitidas por la ley".
"Las condiciones de encarcelamiento que implementé buscan que los terroristas en potencia lo tengan claro: si salen a asesinar judíos, que no esperen un campamento de verano después", aseguró en su canal de Telegram.
El ministro defendió sus políticas como un medio de "disuasión" y acusó a los medios israelíes de hacerle falsamente responsable de los actos de Hamás.
Israel liberó la semana pasada, como parte del acuerdo de intercambio de rehenes con Hamás, a casi 2.000 presos palestinos, la mayoría de ellos arrestados durante los últimos dos años en Gaza y 250 con sentencias de muerte que llevaban años en prisión.
Tanto Hamás como asociaciones de presos condenaron que los presos liberados presentaban claros signos de tortura física y psicológica".
"Muchos prisioneros, en particular los de la Franja de Gaza, presentaban claros signos de tortura física y psicológica, y se documentaron casos de abuso hasta los últimos momentos de su liberación", denunció la Comisión de Asuntos de los Detenidos y Exdetenidos y el Club de Prisioneros.
También han denunciado tortura en los cuerpos de palestinos que Israel ha entregado, que en muchos casos estaban desnudos, con los ojos vendados, símbolos de calcinación y de ejecución.
"El mundo entero ha sido testigo de la magnitud de la criminalidad sistemática (...) Esto quedó claramente evidenciado en los cuerpos de los mártires que fueron llevados a Gaza, con señales de brutal tortura y horribles abusos, lo que dificulta su identificación debido a las atroces violaciones cometidas contra ellos", recordó este jueves Hamás.