De acuerdo a la denuncia, el hombre salió y reingresó al país y no se aisló socialmente como dispone el decreto presidencial vigente desde el 9 de marzo.
Los elementos investigativos señalan que Jair Antonio De Lima ingresó a nuestro país el 16 de marzo proveniente desde Brasil a través de un vuelo que aterrizó en el aeropuerto Silvio Pettirossi. Desde allí concurrió a la empresa de la cual es titular, incumpliendo así con las disposiciones sanitarias del decreto que afectan a personas que ingresan al territorio nacional desde países con circulación de coronavirus.
Posteriormente, el 20 marzo, Jair Antonio volvió a salir del país para trasladarse al Brasil, e ingresó nuevamente el 22 de marzo, en ambas ocasiones por vía aérea. Al llegar a Paraguay, el hombre debía aislarse socialmente, pero una vez más se dirigió directamente a las instalaciones de su empresa.
En el lugar también cumplen funciones varias personas quienes fueron puestas en riesgo ante la falta de aislamiento obligatorio al que debía someterse el empresario.