Varios abogados pasilleros y sus clientes de esta ciudad y de Acahay, cuyos casos que se litigan en la fiscalía local, aseguran que vienen soportando persecución por parte del fiscal Colmán de la Unidad II.
La abogada Nancy Alegretti, manifestó que el hecho ya se denunció ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, la Fiscalía General de la República y ante el Orden de Abogados del Noveno Departamento, supuestamente por que el fiscal muestra parcialidad o ignorancia de las leyes en juicio, comete actos que constituyen inmoralidad en su vida pública.
Además proporciona información, formula declaraciones y hace comentarios a la prensa sobre los juicios cuyos trámites estén a su cargo, afectando el honor y la reputación de muchos procesados, desconociendo la presunción de inocencia.
La abogada Alegretti dijo que piden el desmantelamiento total de la Unidad II, todos deben de irse no solo el fiscal Colmán, agregó, asegura que los abogados pasilleros que litigan en dicha unidad son perseguidos y no se puede trabajar tranquilo cuando se busca mediatizar las causas.
Refirió que si bien está imputada en una causa, ella ya solicitó incluso intimó al fiscal Villagra para que sea sacada del proceso. Dijo que el origen de la imputación surgió en la Unidad II cuando en plena audiencia Manuel Ramírez, el padre de una víctima fatal, comentó que en el marco de resarcimiento del daño causado por el fallecimiento de su hija se entregó un cheque por G. 35 millones y que solo recibió G. 5 millones. Ante dicha situación el fiscal había sugerido a los familiares que denuncien a Alegretti y así lo hicieron y la letrada fue imputada por el fiscal Villagra.
La profesional del derecho dijo que solicitó varias veces ser desvinculada de la causa alegando que la familia recibió todo el dinero, es decir los G. 35 millones e incluso intimó a Villagra. Sin embargo, el proceso continúa.
Asimismo, el abogado Héctor López, manifestó que él ya recusó en varios procesos al fiscal, por qué no se puede litigar en su unidad pues desconoce los procedimientos y cuando se agarra con un abogado porque se le observa su actuar ya comienza la persecución.
Por su parte el agente fiscal dijo que en su unidad no existe persecución y que los manifestantes son clientes de un grupo pequeño de abogados, cuya mayoría tiene denuncia por estafa y están queriendo apartarle de sus casos para buscar impunidad.