“No podemos ver más tantas personas muriendo por causa del tabaco y ver brasileños consumiendo cigarrillos que no pasan por ningún control. Si el cigarrillo que se consume en Brasil ya es malo, imagínese el que es de contrabando, Realmente las autoridades necesitan estar atentas” expresó el moderador Vicente Nunes, editor ejecutivo del Correio Braziliense, al justificar el tema elegido para el debate.
El profesor Jorge Antonio Rachid, consultor tributário e ex secretario de la Receita Federal recordó que en la década del 90 se inició el ingreso de productos de contrabando en el Brasil, que a finales de la referida década aumentó el impuesto.
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El expositor destacó que ante esta situación, los países limítrofes se organizaron y pasaron a importar papel y filtro del Brasil, que nuevamente aumentó los impuestos de exportación. Sin embargo, esta decisión fue recorrida por una industria que producía cinco marcas, dos de las cuales no eran comercializadas en el Brasil, y el Tribunal arbitral del Mercosur Brasil perdió la contienda y se vio obligado a revocar esa decisión.
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Rachid recordó que a instancias de la OMS, se firmó en mayo del 2003 el primer tratado internacional de salud pública, suscrito por 190 países, tras el reconocimiento del tabaquismo como un problema mundial, razón por la cual el Brasil intensificó la implementación de las medidas tendientes a lograr la reducción de la demanda y de la oferta del tabaco.
Acción coordinada para fortalecer control
Abogó por fortalecer la política de control del tabaco, mediante la acción coordinada de órganos del gobierno para combatir el mercado ilícito, mantener la política tributaria de altos impuestos para reducir el consumo, con vistas a tener un impacto positivo en la salud de la ciudadanía.
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“La diplomacia debe buscar la ratificación y la implementación del protocolo para la erradicación del comercio ilícito de productos de los países vecinos pues entre otros, este protocolo va a permitir el control y rastreamiento de la producción de cigarrillos y de sus consumos”, concluyó Rachid, tras recordar que el precio del cigarrillo en el Brasil es controlado y no tiene aumento desde el 2016.
En este punto, Nunes comentó que en el ránking de precios de cigarrillos, entre 181 países Brasil está en la posición 157, con un precio de 5 reales o 1 dólar. Citó a modo de ejemplo, que en Australia, el país que tiene el cigarrillo más caro, el precio es de 21,13 dólares y en Nueva Zelanda, 20 dólares, en Irlanda 15 dólares y en Noruega, 15 dólares.
En la ocasión, se destacó que el 80% de los cigarrillos que ingresan de contrabando al Brasil tiene fabrica en el Paraguay.
Cambio de estrategia es fundamental para combatir el ilícito
“Es un problema que tiene 32 años y es un problema entre un país pequeño y un país mayor. El origen del comercio ilícito es la economía pequeña del Paraguay y el destinatario y afectado es la economía mayor” destacó a su vez el economista Roberto Iglesias, especialista en mercado ilegal del tabaco.
El profesional señaló que es un caso único en el mundo y el problema no es sólo en Paraguay, sino en el Brasil, que tiene dificultades para manejar el tema y afirmó que el aumento de impuestos no tiene incidencia en problema.
“La atención no se enfoca en los actores importantes de este comercio. Se actúa en la frontera y se insiste mucho y la propia industria brasileña enfatiza en el problema de frontera, pero no habla, ni se discute que hay una cabeza de red de productor de cigarrillos en el Paraguay y que hay una distribución mayorista en el Brasil que trabaja en el interior de los estados vecinos y en las grandes ciudades del Brasil”, afirmó.
Para Iglesias, es necesario cambiar la estrategia para poder combatir el problema.
“La solución como dijo el Dr. Rachid, es enfocar en la solución diplomática por un lado, y en los actores relevantes. O sea, tenemos que actuar sobre la cabeza de la red, con instrumentos de derecho internacional y de regulación del mercado de trabajo. Eso implica diálogo, negociación y búsqueda de cooperación con Debemos enfatizar en que Paraguay está afectando la salud brasileña con industria legal (...)”, insistió, al resaltar que el propio Paraguay está obligado a implementar los controles de producción y de distribución, de conformidad con el artículo 15 de la Convención Cuadro para el Control del Tabaco.
“La solución pasa por el Paraguay controlado”
Asimismo, abogó por el apoyo del Brasil a la parte del Paraguay que quiere ratificar el protocolo para eliminar el comercio ilícito.
“La solución económica y diplomática pasa por el Paraguay controlado, a través de la ratificación del protocolo y la implementación de los compromisos internacionales y el Brasil, para facilitar la solución, porque es una industria que tiene importancia en la realidad paraguaya, debe ofrecer entrada formal, regulada, con cobranza de impuestos, a los cigarrillos paraguayos al país. Esta es una discusión que Brasil tiene que hacer o quiere que el problema continúe como hasta ahora, el Brasil siendo afectado por el comercio ilegal de cigarrillos o Brasil decide actuar activamente para discutir una solución con sus vecinos que son parceros económicos y que forman parte del Mercosur junto al Brasil”, concluyó Iglesias.
A su vez, la médica Tania Cavalcante destacó que se trata de un tema de salud pública y que tabagismo es pandemia desde 1996, que causa muertes que pueden ser evitadas en todo el mundo y obliga la adopción de medidas necesarias para reducir el consumo, especialmente entre los jóvenes.
La profesional, que se manifestó a favor del aumento de los impuestos y el direccionamiento de parte de esos recursos para salud,. Asimismo, destacó que la ratificación del protocolo es fundamental pero en este punto, la doctora destacó la necesidad de excluir a los representantes de la industria del tabaco de la comisión conformada para implementar lo establecido en la Convención Cuatro.
“El zorro cuidando del gallinero”
“La industria del tabaco es parte del problema y debe ser afrontada”, señaló, tras comparar la participación de la industria de tabaco en este ámbito de trabajo de la política de salud, a “poner el zorro a cuidar del gallinero” indicó la expositora, exsecretaria executiva da Comisión Nacional de Control del Tabaco.
Otro de los expositores fue el profesor José Angelo Divino, docente de la Universidad Católica de Brasília y coordinador del Programa de Mestrado y Doctorado en Economía, quien abogó por la implementación de controles que permitan el rastreo de los cargamentos de cigarrillos, entre otras medidas que posibiliten la reducción de la demanda.
El interesante debate organizado por Correio Braziliense se desarrolló esta tarde y fue transmitido en vivo en sus redes sociales. Tras sus respectivas exposiciones, los disertantes contestaron preguntas del público.