La Escuela Básica Nº 5627 “Amanecer” ubicada en la compañía Caacupemí de este distrito no tiene rubro de director desde hace más de 20 años. Desde hace tres años, dos docentes cumplen el rol ad honoren, además de enseñar en aulas. La institución matricula cada año a un promedio de 110 alumnos desde el nivel inicial hasta el tercer curso de la educación media.
Las instalaciones tienen numerosas falencias, desde baños con vidrios rotos en las ventanas, humedad en las paredes de la mayoría de las aulas, puertas en estado de deterioro y goteras. También hay construcciones de aulas inconclusas en un sector de la institución. Aunque se realizan mejoras por parte de la administración municipal, a cargo del intendente Humberto Denis Torres (colorado cartista), las necesidades de refacción son múltiples.
La directora del turno mañana, profesora Ilsa Caballero expresó su preocupación ante la falta de respuesta a sus solicitudes de refacción del local escolar y de adjudicación de rubros para la dirección del turno tarde y mañana.
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Un grupo de padres organizados, mediante actividades para recaudación de fondos, consiguió saldar una deuda que superaba G. 5 millones por el suministro de agua potable, comentó la profesora Caballero.
Los alumnos reciben la merienda escolar y recién desde octubre del año 2023, tras insistentes pedidos, fueron beneficiados con el almuerzo escolar y esperan que continúe en el periodo lectivo 2024. Caballero mencionó la importancia de proporcionar la merienda escolar, ya que numerosos provienen de familias de escasos recursos económicos.
El personal docente ve cómo la escuela se desmorona poco a poco. Los pupitres y pizarrones están gravemente deteriorados debido a los años de uso y los profesores tienen que lidiar con escritorios en mal estado.