Basura electrónica, el mal de la era digital que daña nuestra salud

Computadoras, smartphones y electrodomésticos usados se acumulan en nuestro entorno y podrían generar una crisis medioambiental.ABC Color

Entre cámaras digitales, smarthphones y computadoras que inundan los vertederos, la basura electrónica se suma a los males del siglo XXI, poniendo en peligro nuestra salud y dañando el medioambiente. ¿Conocés el paradero de los dispositivos que desechás?

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Computadoras, smartphones y electrodomésticos usados se acumulan en nuestro entorno y podrían generar una crisis medioambiental. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) reveló que, en el 2018, se generaron 50 millones de toneladas de basura electrónica en todo el mundo, cifra equivalente a 4.500 torres Eiffel.

No es una exageración decir que, si seguimos este ritmo, el ambiente estará inundado de basuras tecnológicas. La ONU estima que, para el 2050, la cantidad de chatarra electrónica podría llegar a 120 millones de toneladas.

Asimismo, se calcula que la chatarra electrónica, acumulada en el mundo, contiene más de 62.500 millones de dólares en materiales preciosos como oro, cobre e hierro, según datos de un informe, publicado en el 2017 por el Global E-waste Monitor. Esta enorme cantidad de dinero supera el producto interno bruto de 123 países.

Los televisores, celulares y microondas que van al tacho de basura, en muchos casos, recorren un largo camino e, incluso, trascienden fronteras, pues un gran número de los desechos de este tipo se envían ilegalmente a países pobres. Por este motivo, el reciclaje de los elementos de valor presentes en la basura electrónica, como el cobre o el oro, se ha convertido en una fuente de ingresos para naciones en vías de desarrollo.

De acuerdo a informes del Centro de Coordinación del Convenio de Basilea, la Unión Europea es responsable del 77% de la chatarra electrónica que ingresa ilegalmente a Nigeria. De igual manera, según la Organización Internacional del Trabajo, hasta 100.000 personas de este país africano trabajan en el sector de la basura electrónica, mientras que en China la cifra es de 690.000.

En la ciudad china de Guiyu, que recibe basura electrónica de todo el mundo para reprocesarla, la contaminación con metales pesados ha vuelto tóxicos el aire y el agua. Por este motivo, los niños tienen altos niveles de plomo en la sangre, según un estudio realizado por investigadores de la Universidad Médica de Shantou.

El mercurio, que produce daños al cerebro y el sistema nervioso, el plomo, que tiene efectos perjudiciales en el sistema circulatorio, y el cadmio, que puede provocar infertilidad, son algunos de los materiales peligrosos que se encuentran dentro de los desechos electrónicos, de acuerdo a publicaciones del National Geographic.

La chatarra electrónica no solo contamina el ambiente, sino que también pone en riesgo la salud humana; sin embargo, en nuestro país no existe ninguna ley sobre reciclaje de residuos electrónicos ni hay empresas que procesen desechos de este tipo. No obstante, en Asunción existe una firma local llamada “Tayi Ambiental”, que se dedica a enterrar esta chatarra de manera segura para evitar que proliferen los contenidos tóxicos que posee.

Cada paraguayo produce cerca de siete kilos de desperdicios tecnológicos por año, según el informe del Observatorio Mundial de los Residuos Electrónicos 2017. Igualmente, un estudio de la ONG Gestión Ambiental y la Universidad Católica de Asunción concluyó que, solo en la capital y Central, se generan 1.700 toneladas de chatarra electrónica cada año.

A este paso, ¿cuánto falta para que la chatarra electrónica inunde nuestros vertederos?

Por Agustina Vallena (19 años)

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