Además de los tradicionales puestos de venta de chipa, comidas rápidas y agua, este año, en las festividades de la Virgen de los Milagros de Caacupé nacieron otros “negocios” como el alquiler de sillas o la recarga de batería de celulares. ¿Los precios? Y... están dando qué hablar.
Alumnos del Colegio República del Perú se mostraron desmotivados por las deficiencias que observan al volver a las aulas, donde ni siquiera hay sillas suficientes. Aseguran que algunos optaron por no acudir a clases al no tener ni dónde sentarse.
Un mujer dedicada al alquiler de sillas para eventos de diversa índole brindó sus servicios para una actividad política de afiliados al Partido Colorado, cuyos responsables –asegura– se hicieron los desentendidos a la hora de pagar la cuenta. Solo después de hacer pública su queja, le pagaron, afirmó.
Unas 20 sillitas fueron donadas a la escuela Cnel. José María Argaña de Pedro Juan Caballero por los diputados Marcial Lezcano (ANR, cartista) y Juan Bartolomé Ramírez (PLRA), lo cual fue resaltado por el diputado Lezcano en su página de Facebook.
Desde la Policía insisten en que la adquisición de sillas para personal administrativo a precios diez veces mayores que los reales se trató de un “simple error”. Sin embargo, documentos revelan que todo el lote de muebles, electrónicos y electrodomésticos tenía valores inflados.