Representantes de la industria agroveterinaria resaltan cómo la colaboración entre veterinarios y proveedores impulsa la salud animal.
En Paraguay, cada 10 de agosto se celebra el Día del Veterinario, que con entrega y amor cuida del bienestar de los animales y es clave en la salud pública mediante el control, prevención y erradicación de la zoonosis.
En este Día del Veterinario, desde el sector buscan enviar un mensaje especial para contribuir con el bienestar animal, y es que detrás de cada mascota sana hay profesionales dedicados y una industria que evoluciona para acompañarlos.
Los veterinarios reciben esta fecha con orgullo y gratitud, subrayando cómo la valoración social refuerza su vocación, pero sobre todo el respeto demostrado por quienes tienen una mascota y las valoran como miembro de sus familias.
“Trabajar con mascotas es pura pasión”, señala la doctora veterinaria Sabrina Sardi, encargada de ventas y desarrollo comercial de Iris, una empresa paraguaya socialmente responsable dedicada a la producción y comercialización de productos, insecticidas y de limpieza; veterinarios y cosméticos.
Iris tiene como propósito lograr la satisfacción y fidelidad de sus colaboradores, clientes y consumidores.
“Proteger la salud y seguridad de nuestros colaboradores y trabajar en armonía con los intereses de la comunidad”, señala.
“Hoy el sello de calidad Kerkus se ha extendido a más de cinco países, logrando de esta forma la licencia Marca País, lo que reconoce el prestigio y la calidad de la marca”, destaca.
La profesional añade que el crecimiento del rubro se da gracias a la combinación de amor por los animales y profesionalismo.
La sinergia entre veterinarios y proveedores es fundamental.
Empresas como Iris, con productos certificados bajo normas ISO 9001 y buenas prácticas de manufactura (BPM), enfatizan que el conocimiento técnico de los veterinarios es vital para recomendar insumos adecuados. “Juntos generamos confianza en los tutores y mejores resultados”, explica Sardi.
Innovación
Entre las novedades del sector destaca un repelente educador para mascotas, diseñado para corregir conductas con un enfoque amable y accesible. La empresa asegura calidad mediante controles estrictos y certificaciones internacionales, priorizando la eficacia y seguridad.
El sector enfrenta obstáculos, como la importación de materias primas, sujeta a regulaciones complejas que impactan en costos y plazos. Pese a ello, el compromiso es mantener estándares altos para apoyar a los profesionales.