La fiscala Ortiz se constituyó hasta la sede de gobierno departamental en Areguá, donde esta tarde se festejó, violando la cuarentena sanitaria, el cumpleaños de Rubén Vera, un amigo del gobernador de Central Hugo Javier y tras dialogar con el guardia de seguridad, indicó que no tuvieron acceso al sitio.
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La agente del Ministerio Público explicó que no pueden ingresar a la fuerza a las oficinas, sin permiso judicial. En vista que el guardia de turno no contaba con las llaves de los compartimientos donde se celebró el cumpleaños del asesor del gobernador, la fiscal trató de comunicarse con Hugo Javier y con el administrador de la Gobernación, Javier Rojas, para que se constituyan en el lugar del procedimiento, pero ninguno contestó a las llamadas.
“Mañana a las 8:00 de la mañana voy a estar constituyéndome nuevamente en compañía de un funcionario de laboratorio forense entendido en la materia de estos insumos informáticos”, informó la fiscala tras dialogar con Fausto Portillo, asesor de la Gobernación.
La misma le advirtió al funcionario que si no permitían el acceso, “el Ministerio Público va a venir con la fuerza pública, con el permiso legal”. Según informó nuestra corresponsal Gladys Villalba, una patrullera de la Comisaría 18a. de Areguá quedó resguardando el predio de la Gobernación. El temor es que la noche pueda ser aprovechada para borrar evidencias.
“El guardia de seguridad me ha proporcionado ciertos datos y ha mencionado que efectivamente él no se encontraba de guardia, y que mayores datos podría aportar el otro colega suyo, quien presta servicios desde 6:00 de la mañana hasta las 18:00 horas”, dijo la fiscala, quien insistió que la intención es retornar mañana ya “con un técnico en informática a los efectos de recabar esta información con los cuidados respectivos que amerita”.
La fiscala destacó que la ley también le permite recurrir a las fotografías y videos de nuestro diario, que llegó cuando aún se desarrollaba la fiesta y cuando se retiraron los participantes, así como también se puede solicitar la declaración testifical de vecinos como pruebas, y reiteró que una vez que tenga los elementos, no tendría inconvenientes en imputar a los responsables.
Una de las pruebas más contundentes para probar la presencia del jefe departamental, también reconocido por su nombre de animador de fiestas “El número 2”, es que su voz se escucha en el video del karaoke que estaban realizando en el interior de la sede estatal.