Dada la incertidumbre al comenzar el año escolar, Romero comentó que realizaron una encuesta con los padres sobre qué preferían: clases virtuales o presenciales, y las clases presenciales ganaron por un porcentaje muy alto.
Por eso, con inspección previa del MEC, la institución fue habilitada para dar clases con el sistema denominado “burbuja”, rotando los grupos para no aglomerarse. En total, son 510 estudiantes de primaria y secundaria y 34 docentes y personal administrativo que se organizan de esa forma.
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En cuanto a la virtualidad, mencionó que fue una experiencia difícil el año pasado y que probaron varios planes, pero aun así prefieren hacerlo de forma semipresencial.
“Este tiempo que vivimos aislados ha sido un tiempo difícil. Esto de venir al colegio permite muchas cosas, como desarrollar la parte social, estar con los compañeros, no solamente quedarte en casa y no ver a nadie. Esa es una presión muy grande en la parte emocional y psicológica”, dijo.
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El colegio cuenta también con un equipo de apoyo espiritual, una consejera para las chicas y una psicóloga que trabaja con todos los niveles. Hasta el momento, la institución no tiene ningún caso positivo de COVID- 19 y cuidan al máximo las medidas sanitarias, pero si los padres por algún caso sospechoso no quieren enviar a los alumnos al colegio, lo pueden hacer, priorizando la salud, pero sin descuidar la educación. Con respecto a la deserción escolar, mencionó que fue muy bajo el índice el año pasado y que trabajan para mantenerlo así.
El último reporte de la XVl Región Sanitaria del departamento de Boquerón informó de ocho casos positivos de coronavirus: dos del distrito de Mariscal Estigarribia, cinco de Loma Plata y uno de Filadelfia, todos en aislamiento.