Trabajo solidario de pobladores asegura distribución de agua potable en Fuerte Olimpo

Fuerte Olimpo cuenta con un promedio de 700 usuarios, quienes pagan de manera mensual por el servicio de agua potable una tarifa de entre G. 30.000 y G. 35.000, suma muy ínfima atendiendo al alto costo que se paga por los insumos para potabilizar el vital líquido, así lo refirió el presidente de la Junta de Saneamiento, Fernando Giménez.

El costo de una bolsa de sulfato es de G. 220.000 y el de un tambor de 200 litros de cloro, G. 600.000, a lo que se suma el pago de fletes, ya que son traídos desde la capital del país, aseguró el docente.

Sumado al alto costo de los insumos y el ínfimo pago de los usuarios por el consumo del agua, la Junta no es una institución recaudadora y solo se busca asegurar que no falte agua en los hogares, sostuvo Giménez.

“Asumimos en el 2020 esta responsabilidad con los integrantes de la comisión. Desde el principio tuvimos que realizar un arduo trabajo a fin de evitar que pare el servicio, ya que anteriormente los cortes eran de manera permanente. Solo se tenía el agua por unas pocas horas, a lo que se sumaba la alta morosidad consistente en un promedio del 60% de personas que no pagaban por el servicio”, acoto Giménez.

A diferencia de otras juntas de saneamiento del país, cuyos miembros principales perciben un salario, los funcionarios de Fuerte Olimpo trabajan a puro pulmón sin recibir pago alguno. A esto también se suma el trabajo desinteresado de otras personas de la comunidad, quienes apoyan esta loable tarea comunitaria de brindar el servicio a los pobladores, dijo el entrevistado.

“En este momento que la sequía comienza de nuevo a causar estragos en varias comunidades del distrito, estamos distribuyendo el agua potable en camiones cisterna de manera gratuita. Recibimos ayuda de instituciones como la Gobernación y el municipio y ahora estamos pidiendo a las autoridades de la Secretaría Nacional de Emergencia que nos envíen los insumos, ya que la sequía recién comienza, por lo que el acarreo del agua a las poblaciones afectadas será por mucho tiempo”, resaltó.

La distribución del agua llega a todos los barrios de la comunidad. También se logró reducir la morosidad de un 60% al 30%, que aún es bastante alta. El objetivo es que todos paguen por el uso del agua.

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Finalmente, el presidente dijo que están realizando la colocación de medidores en las viviendas, con el objetivo de que el usuario pague por el consumo que utiliza, pero por sobre todo para tener conciencia del buen uso del vital líquido.