Prevenir la obesidad desde bebés

Prevenir la obesidad desde bebés es la responsabilidad de los padres, abuelos y cuidadores. La Dra. Marta Cristina Sanabria, pediatra nutrióloga, máster en nutrición clínica relacionó la alimentación con la prevención de enfermedades.

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Una futura mamá bien nutrida es un buen principio para asegurar un niño con buen peso y talla.

Dar de mamar al bebé en forma exclusiva durante los primeros seis meses previene la obesidad. La leche materna contiene todos los nutrientes esenciales para el crecimiento adecuado del bebé y para su neurodesarrollo.

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“A partir de los seis meses de edad del bebé, se inicia la alimentación complementaria, un periodo muy importante para establecer las preferencias alimentarias que perdurarán en etapas posteriores”, manifestó la profesional.

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Tal como lo señala la Sociedad Latinoamericana de Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica (LASPGHAN) es un proceso en el que se tienen que tomar en cuenta el momento correcto de la introducción de alimentos.

Prevenir la obesidad desde bebés y los aspectos sensoriales

Es aconsejable una alimentación complementaria y crear un ambiente correcto, considerar aspectos sensoriales, interpretar las señales de hambre y saciedad, los aspectos culturales y, la percepción de los padres, según refirió la doctora.

El Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición del MSP y BS, elaboró junto con la Sociedad Paraguaya de Pediatría, la Universidad Nacional de Asunción y otras instituciones las Guías alimentarias para niños menores de dos años de edad (www.inan.gov.py).

El bebé empezará a comer alimentos sólidos y a tomar agua cuando tenga alrededor de 6 meses. Es el momento en que sostiene la cabeza, permanece sentado con poco apoyo y es capaz de agarrar los objetos que le dan. Es cuando mantiene los alimentos en la boca, los desplaza hacia atrás y traga, según Unicef.

“A partir de los seis meses de edad, además de la leche materna, el bebé debe comer otros alimentos como carnes, huevo, porotos, cereales, verduras y frutas, en forma de puré, luego molidos, picaditos o desmenuzados”.

Se recomienda combinar ambos métodos para alimentar al bebé, por un lado, darle de comer con una cucharita y por otro lado, que el bebé también tome los alimentos con las manos y conozca nuevas texturas.

Los No de la nutrición

1. Evite dar al bebé jugos azucarados.
2. Gaseosas.
3. Galletitas dulces.
4. Postres azucarados.

Bebés sanos son bebés felices, y es mucho lo que puede hacer desde la nutrición.